La senadora Isabel Allende, hija del fallecido presidente chileno Salvador Allende, se mostró hoy molesta con la difusión en televisión de un reportaje que indica que su padre podría haber recibido dos disparos ya que señaló que ese documento ya estaba en manos del juez.

El programa "Informe Especial", emitido este lunes por la Televisión Nacional de Chile (TVN), presentó como inédito un informe de la fiscalía militar fechado en 1973 que abre la posibilidad de que Allende no se suicidara, como durante 38 años ha sostenido la versión oficial.

"Me parece que el canal nacional, que es público, ha hecho un acto completamente irresponsable, poco prudente, de haber presentado un programa con características muy espectaculares basándose fundamentalmente en algo único e inédito que ya estaba en el expediente del ministro (Mario) Carroza hace mucho tiempo", dijo hoy Allende.

En declaraciones a los periodistas en el Palacio de los Tribunales, Allende expresó su "profunda molestia y desazón" y consideró "totalmente reprochable lo que ha hecho el único canal público" de Chile, al que acusó de caer en el "amarillismo".

El reportaje se emitió una semana después de que los restos del presidente fueran exhumados con el fin de practicar las pericias que en un plazo de tres meses determinarán las circunstancias de su muerte, ocurrida el 11 de septiembre de 1973, durante el golpe de Estado de Augusto Pinochet.

La exhumación fue ordenada por el juez Mario Carroza después de que en abril un informe del Servicio Médico Legal (SML) revelara "discordancias" entre la autopsia ordenada por el régimen militar y un peritaje hecho por la policía de investigaciones que hablaba de la existencia de tres heridas de bala (una de entrada y dos de salida).

La senadora indicó que ella transmitió su queja al director del canal, Mauro Valdés, antes incluso de la transmisión del reportaje, y anunció que evaluará la posibilidad de presentar una queja contra TVN a través de la Cámara de Diputados.

Por otra parte, la senadora indicó que el Ejército y la Policía de Investigaciones "han entregado un fusil similar" al AK-47 del que supuestamente salió una bala que terminó con la vida del mandatario y cuyo rastro se perdió poco después del golpe de Estado.