La Comisión Europea (CE) no considera necesario un bloqueo general de la importación de pepinos y de otros productos agrícolas procedentes de España, una medida que han comenzado a aplicar países como Austria, Bélgica o la República Checa, según dijo hoy un experto del Ejecutivo comunitario.

Bruselas confía en las medidas tomadas por las autoridades españolas para controlar la circulación de productos procedentes de las dos explotaciones de Málaga y Almería identificadas por Alemania como posible origen de la infección, explicó la misma fuente.

Dinamarca, Austria, la República Checa y Bélgica han anunciado en los últimos días la retirada del mercado de partidas de pepinos y de otros productos hortofrutícolas procedentes de España por temor a la presencia en ellos de una bacteria intestinal detectada en Alemania.

Para el Ejecutivo comunitario, el bloqueo de los productos cultivados en las dos explotaciones concretas que le comunicó el Gobierno español es suficiente hasta que se disponga de datos fiables sobre el origen de la infección, añadió el experto comunitario.

En la misma línea, la portavoz la del Ejecutivo comunitario, Pia Ahrenkilde, afirmó que la Comisión "no tiene recomendaciones específicas" para los consumidores ni para los estados miembros, más allá de la puesta en marcha del Sistema de Alerta Rápida de Alimentos y Piensos.

La portavoz recalcó que la CE está "siguiendo la situación de cerca" y que intenta "hablar con conocimiento de causa", y por ello pide paciencia para aguardar a tener los resultados de los análisis.

Después de que el viernes pasado Alemania confirmara la presencia de la bacteria "E. coli Enterohemorrágica" en partidas de pepinos procedentes de España, las autoridades españolas comenzaron a recoger muestras en los lugares de producción, un proceso cuyos resultados se conocerán "el martes o el miércoles", según la CE.

Los análisis de las muestras recogidas en España los llevará a cabo el laboratorio de referencia de ese país en el ámbito veterinario, que después deberá cotejar los resultados con otros laboratorios de referencia europeos, explicó la citada fuente comunitaria.

El experto también señaló que la cepa O157:H7 de la "Escherichia coli", responsable de los graves casos de infección con diarrea sangrienta, "no se había encontrado en Europa en los últimos cinco años".

Según Berlín, en Alemania ya se han registrado trece muertos y unos 1.200 infectados, y también ha habido casos de infección en varios otros países entre personas que han transitado por el norte de Alemania, añadió el experto comunitario, quien negó que el brote de la bacteria pueda ser calificado de epidemia, ya que las infecciones no se produjeron por contagio entre personas.