El Gobierno, hosteleros, productores de bebidas y asociaciones de padres firmarán un pacto por el que cada uno de ellos se comprometerá a poner en marcha acciones concretas encaminadas a reducir el consumo de alcohol en los menores.

Este pacto, que ha sido anunciado hoy por la ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, forma parte de una "potente" campaña sobre el consumo de alcohol en jóvenes y adolescentes que el Gobierno tiene previsto poner en marcha, a través del Plan Nacional sobre Drogas, cuya primera fase estará lista a finales de este semestre.

Pajín, que ha clausurado la IV reunión del ''Foro la sociedad ante las drogas'', ha explicado que la campaña tiene como objetivo sensibilizar especialmente a los jóvenes y menores, a la hostelería, a los productores de bebidas alcohólicas y a asociaciones de padres y madres sobre los riesgos, "pero siempre desde el autocontrol, la responsabilidad y el consenso".

"Esa es la mejor forma de avanzar con eficacia", ha subrayado la ministra.

A pesar de que la proporción de menores de entre 14 y 18 años que no consumen alcohol es mayor que hace 14 años, Pajín ha recordado que hay un aumento de la prevalencia del consumo intensivo o de las intoxicaciones etílicas en ellos, un aspecto en el que, según la ministra, hay que incidir.

Esta cuestión se agrava por el hecho de que la percepción del riesgo de este consumo es "igualmente baja entre los jóvenes y los mayores", ha señalado la ministra, por lo que las medidas de sensibilización deben ir dirigidas a toda la sociedad.

Leire Pajín ha señalado que el ocio es una conquista social del Estado del bienestar y un éxito especialmente importante para los más jóvenes, porque constituye una parte más de su formación.

También los mayores niveles de libertad de los más jóvenes constituyen uno de los cambios más importantes de las sociedades adelantadas, que les ha permitido avanzar en protagonizar sus propias vidas, ha dicho.

La ministra ha defendido mantener esos avances sociales, pero, a la vez, ha pedido responsabilidad a los jóvenes para enfrentarse a los riesgos que el ocio y la libertad conllevan.

La titular de Sanidad ha pedido aunar esfuerzos a favor de "aquellos que peor lo están pasando", ya que la crisis económica puede servir de "excusa a algunos para decretar el fin del Estado del bienestar o comenzar su desmantelamiento", mediante la revisión de derechos sociales.

A este respecto, la ministra se ha mostrado a favor de "mantener clara y rotundamente una postura de defensa de los avances consolidados en los últimos años" y ha considerado que los afectados por el consumo de drogas y sus familiares continúan necesitando políticas sociales y de políticas públicas de solidaridad.

La ministra ha manifestado su plena confianza en el Plan Nacional sobre Drogas para analizar y responder a las situaciones que pueden plantearse y tomar las decisiones oportunas para hacer frente a los problemas emergentes y ha recordado que se trata de un proyecto compartido por el Estado, comunidades autónomas, ayuntamientos y organizaciones sociales.

Por su parte, la delegada del Plan Nacional sobre Drogas, Nuria Espí, se ha mostrado a favor de debatir la posibilidad de disminuir la edad legal para consumir alcohol, que salvo en Asturias, se sitúa en los 18 años en todas las comunidades autónomas, si bien ha considerado más importante "dificultar el acceso" de los jóvenes.

Espí respondía así a una propuesta lanzada por el profesor Javier Elzo, quien ha señalado que si la ley, además de impuesta, es inaplicable, es imposible que funcione.

Tras asegurar que la ley del alcohol es la norma más incumplida en España, este catedrático de Sociología ha abogado por una prevención encaminada hacia un consumo responsable.

Durante la inauguración de las jornadas, la secretaria general de Política Social y Consumo, Isabel Martínez, ha señalado que las redes sociales son una herramienta divulgativa "extraordinariamente poderosa" y ha pedido abordar el consumo de alcohol en menores de "una manera contundente".