La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha ordenado al Juzgado de Instrucción número dos de la Audiencia Nacional investigar al grupo ultra burgalés ''Resaca Castellana'' después de que la Policía localizara en un registro de uno de sus locales en 2010 material para la fabricación de cócteles molotov y artefactos explosivos.
Según se desprende de un auto del alto tribunal hecho público este lunes, los magistrados del TS consideran que los miembros de la organización radical, que agrupa a seguidores del Burgos Club de Fútbol, podrían haber incurrido en la comisión de un delito tipificado en el artículo 577 del Código Penal cuya instrucción sería competencia de la Audiencia Nacional.
La sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha dirimido de esta forma una cuestión de competencia planteada por un Juzgado de Burgos que se inhibió a favor de la Audiencia Nacional. El juez Ismael Moreno, titular del Juzgado número dos, rechazó asumir la instrucción al entender que la cuestión no era de su competencia.
No obstante, los magistrados del TS se muestran de acuerdo con la opinión del fiscal que reflejó en su informe que las acciones del grupo ultra podrían coincidir "con los fines terroristas".
''JORNADAS DE LUCHA''
El registro del local de ''Resaca Castellana'' tuvo lugar pocos días antes de la celebración en Burgos de una Cumbre de ministros de Trabajo y Seguridad Social de la Unión Europea, después de que la Policía averiguara que el grupo radical tenía previsto llevar a cabo durante la reunión unas ''jornadas de lucha''.
Entre el material incautado se encontraban distintas sustancias químicas y petardos y cohetes de gran potencia. Los agentes localizaron también un hacha, navajas y multitud de bates de béisbol y palos. Los seguidores del Burgos Club de Fútbol disponían de un manual de lucha callejera con instrucciones sobre la elaboración de artefactos explosivos.
Los miembros de ''Resaca Castellana'' guardaban en el local un cartel con la expresión ''muerte al Rey'' por lo que el juez Moreno deberá determinar ahora si el grupo ultra es responsable, además, de un delito contra la Corona.