Varias organizaciones sanitarias de alcance mundial están experimentando importantes reducciones en sus fondos, lo que pone en riesgo algunos avances en la lucha contra enfermedades como la polio, el sida o la malaria. Así lo señaló ayer la directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, quien dijo que, además de su propia institución, otras como el Fondo Mundial contra el Sida, la Malaria y la Tuberculosis y la Alianza Gavi también han visto disminuir sus presupuestos.

Al inaugurar en Ginebra el Consejo Ejecutivo de la OMS, órgano constituido por 34 países, Chan expresó sus temores de que la situación económica internacional pueda afectar a progresos e innovaciones en la lucha contra males como la meningitis, la tuberculosis o el sida, que son problemas sanitarios fundamentales en muchos países de escasos recursos.

"Las mosquiteras deben ser reemplazadas, la terapia con antirretrovirales debe ser administrada de por vida, el diagnóstico y el tratamiento de la tuberculosis deben intensificarse y cada bebé debe ser vacunado", dijo.