El papa Benedicto XVI pide a las autoridades de los países un mayor interés en las estructuras sanitarias que sirven de ayuda y apoyo a aquellas personas que sufren, sobre todo los más pobres y necesitados.

El Pontífice hace este llamamiento en su mensaje con motivo de la Jornada Mundial del Enfermo del próximo 11 de febrero de 2011, cuyo contenido, que tiene fecha de 21 de noviembre de 2010, fue anticipado hoy por la Santa Sede.

"Invito a las autoridades a que inviertan siempre más energías en estructuras sanitarias que sean de ayuda y apoyo a quienes sufren, sobre todo a los más pobres y necesitados", afirma Benedicto XVI en el mensaje.

"Una sociedad que no consigue aceptar a quienes sufren y que no es capaz de contribuir mediante la compasión a actuar para que el sufrimiento sea compartido y llevado también interiormente es una sociedad cruel e inhumana", agrega.

El Papa tiene además unas palabras para los más jóvenes, en especial para quienes "viven la experiencia de la enfermedad", de cara a la Jornada Mundial de la Juventud que se celebrará en Madrid en agosto del año que viene.

"A menudo la Pasión, la cruz de Jesús, dan miedo, porque parecen ser la negación de la vida. En realidad es exactamente lo contrario. La cruz es el ''sí'' de Dios al hombre, la expresión más alta y más intensa de su amor y la fuente de la que brota la vida eterna", comenta el Papa, quien invita a los jóvenes a "encontrarse" con Jesús en la eucaristía.

En su mensaje con motivo de la Jornada Mundial del Enfermo 2011, el Pontífice tiene un recuerdo para todos aquellos, como médicos o voluntarios, que "se dedican con amor a curar y aliviar las llagas de todos los hermanos y hermanas enfermos".