El 70 por ciento del caucho procedente de neumáticos fuera de uso se recicla ó se reutiliza y el 30 por ciento restante se transforma en combustible alternativo para su uso en cementeras.

España cerró el ejercicio pasado con un volumen de neumáticos fuera de uso de 314.000 toneladas, lo que le sitúa un 10 por ciento por encima de la media de la Unión Europea, según un informe realizado por la Asociación Europea de Fabricantes de Neumáticos y Productos de Caucho (ETRMA, en sus siglas en inglés).

Este volumen supone el cien por cien del tratamiento de neumáticos.

Según este estudio, el mercado español es el quinto país de la Unión Europea que más neumáticos fuera de uso produce anualmente, tan sólo por detrás de Alemania (568.000 toneladas), Reino Unido (508.000), Italia (421.000) y Francia (369.000).

Del 70 por ciento del caucho que se destina a la reutilización o reciclaje un 50 (153.000 toneladas) solo se recicla, un 8 por ciento se reutiliza directamente si la cubierta lo permite y un 12 por ciento se recauchuta.

Entre las múltiples aplicaciones del caucho reciclado se encuentra la fabricación de suelos elásticos prefabricados, granza para campos de fútbol de hierba artificial, pavimentos para parques infantiles o materiales aislantes, tanto térmicos como acústicos.