Un equipo de paleontólogos de la Universidad Brigham Young de Utah (Estados Unidos) ha descubierto una nueva especie de dinosaurios, llamada Abydosaurus, gracias al raro hallazgo de cuatro cráneos, dos de ellos en perfecto estado.

De las 120 especies de saurópodos - los dinosaurios de mayor tamaño- que poblaron la Tierra, sólo se habían hallado ocho cráneos completos hasta ahora.

El análisis de los huesos, publicado en la revista Naturwissenshaften, indica que el familiar más cercano de esta especie, que vivió hace 150 millones de años, fue el Braquiosaurio (45 millones de años anterior), que también era herbívoro, tenía un largo cuello, una extensa cola y cuatro patas.

Los cráneos, pertenecientes a cuatro ejemplares jóvenes de Abydosaurus, fueron encontrados en una cantera en el recinto del Monumento Nacional de los Dinosaurios, al este de Utah (EEUU).

Para destapar los huesos, el equipo de paleontólogos tuvo que emplear martillos y sierras y desprenderse de una capa de piedra arenisca -de unos 105 millones de años- que los cubría.

"Frente a los huesos fuertes de otros, que se fusionan, el cráneo de los saurópodos está hecho de huesos finos enlazados por un tejido suave", explicó Brooks Britt, paleontólogo de esa universidad estadounidense.

"Normalmente se separan rápido tras la muerte del animal y se desintegran", añadió el coautor del proyecto.

Según este investigador, lo que la mayoría de científicos sabe sobre los saurópodos es gracias a su cuello, pero los últimos cráneos encontrados proporcionan nueva información sobre esos dinosaurios, como su forma de comer.

"No masticaban la comida, sólo la agarraban y se la tragaban", indicó Britt.