La situación nutricional de la mujer canaria al comienzo del embarazo no suele ser óptima, según un artículo de investigación en el que se recogen los resultados de un estudio sobre los hábitos nutricionales y la composición de la dieta de mujeres embarazadas que dieron a luz en el Hospital Universitario Materno-Infantil de Gran Canaria.

En concreto, los investigadores de dicho estudio, Almudena Sánchez, Adriana Ortiz y Lluís Serra Majem, pertenecen al Grupo de Investigación de Nutrición del Departamento de Ciencias Clínicas de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC). En dicho análisis también participó el investigador del Departamento de Obstetricia y Ginecología del Hospital Universitario Materno-Infantil, Octavio Ramírez, según informó la ULPGC en nota de prensa.

Así, el artículo bajo el título ''Valoración de la calidad nutricional de la dieta en gestantes sanas de Canarias'' ha sido publicado en la revista especializada Medicina Clínica y en ella se expone la citada investigación basada en un estudio transversal realizado a mujeres de entre 18 y 40 años, estimando el consumo de alimentos, macronutrientes (principalmente hidratos de carbono, proteínas y grasas) y micronutrientes (yodo, hierro, vitamina A, ácido fólico y calcio, entre otros), todo ello a través de un cuestionario de frecuencia de consumo utilizado en la Encuesta Nutricional de Canarias.

En cuanto a la puntuación alcanzada en estos cuestionarios "se aleja" de la recomendada como óptima para las mujeres canarias gestantes y en ella destaca que el consumo de cereales fue inferior al número de dosis diarias recomendadas, mientras que el consumo de vegetales, frutas, lácteos y carnes superó las recomendaciones.

Por otra lado, se observó que un importante número de entrevistadas no alcanzó el 50 por ciento de la ingesta recomendada de hierro, folatos y vitamina D; mientras que más de un 30 por ciento de las mujeres superó el 200 por ciento de las cantidades recomendadas de proteínas, tiamina, riboflavina, así como de vitaminas A y C.

Así, la conclusión que han alcanzado los investigadores "es que es necesario el consejo dietético para mejorar" la calidad de la dieta durante el embarazo y la suplementación principalmente con hierro y folatos. De todos modos, la mayoría de los controles que se llevan a cabo actualmente están orientados hacia la evolución del peso durante el periodo de gestación y "generalmente no se da importancia a la composición y calidad de la dieta".

Sin embargo, los investigadores apuntaron a que una ingesta nutricional adecuada durante el embarazo permite, no sólo potenciar la salud de la mujer y prevenir enfermedades gestacionales, sino que también se relaciona con la salud del niño e incluso con la aparición de enfermedades crónicas en la vida adulta.

Por ello, teniendo en cuenta que la situación nutricional de la mujer canaria al comenzar el embarazo no suele ser óptima, el aumento de sus necesidades al empezar la gestación hace que los problemas nutricionales se mantengan o empeoren. Esto es un hecho relevante en Canarias donde la obesidad se está convirtiendo en un "serio" problema de salud pública, presentando las cifras "más altas de toda España".