Aunque no existe una vinculación directa entre crisis económica y racismo, el momento actual está propiciando un resurgimiento de este fenómeno de forma muy localizada, según recoge un informe realizado por Movimiento por la Paz, el Desarme y la Libertad en Canarias (MPDLC).

El documento, desarrollado dentro de la campaña de sensibilización "Más allá de la noticia" que financia la Viceconsejería de Bienestar Social e Inmigración del Gobierno de Canarias y la Dirección General de Integración de los Inmigrantes del Ejecutivo central, pretende determinar, a través de la opinión del Gobierno autónomo, de expertos del ámbito universitario, sindicatos, ONG dedicadas a la inmigración y asociaciones de inmigrantes, si se está produciendo un aumento del racismo como consecuencia de la crisis.

El informe contextualiza este fenómeno en el ámbito nacional, en donde entidades especializadas en racismo, como es el caso del Observatorio Español del Racismo y la Xenofobia (Oberaxe), SOS Racismo y Movimiento contra la Intolerancia, ponen de manifiesto una evolución al alza de este fenómeno España.

Sin embargo, entre las conclusiones aportadas por los expertos entrevistados en el Archipiélago, MPDLC recoge que la mayoría constata una mayor tolerancia en el caso de los ciudadanos canarios como consecuencia de la situación geoestratégica de las Islas.

Asimismo, se refiere a la población africana como una de las principales víctimas del discurso racista, aspecto que va en línea con las diferencias físicas más visibles y de idioma que presenta este colectivo y una menor vinculación cultural con la población autóctona que la que presentan otros grupos, como es el caso de los latinoamericanos.

El estudio hace hincapié en la necesidad de seguir trabajando en medidas que contribuyan a frenar el avance del racismo, apostando por el desarrollo de campañas institucionales de sensibilización, la potenciación de la interculturalidad en el ámbito educativo, la convivencia entre etnias y el reforzamiento de la empatía como estrategia para aprender a sentir lo que siente el otro.