Alberto Darias Príncipe, director del curso "El turismo cultural como base para un desarrollo sostenible: Costa-Adeje y La Gomera", defiende que en las Islas Canarias siempre ha existido un turismo alternativo al tradicional de sol y playa.

El catedrático de Historia del Arte de la Universidad de La Laguna (ULL) sostiene, en este sentido, que "lo idóneo sería sensibilizar a los medios que lo gestionan para obtener más que un mayor rendimiento, una diversidad mayor".

A juicio de Darias, las Islas poseen una variedad muy grande en torno a sus atractivos históricos, culturales y medioambientales, que, desde siempre, ha llamado la atención de nuestros visitantes.

"Acaso no recordamos al inglés chalado que venía a recorrer los montes de Anaga, en Tenerife, o El Cedro, en La Gomera, o Los Tilos, en La Palma. Ahora ese fenómeno, que antes nos llamaba poderosamente la atención, se ha multiplicado y a nuestra tierras vienen gentes de todos lados para conocer nuestros paisajes, para hacer senderismo, para conocer nuestra historia, nuestros monumentos y nuestras forma de vida, y costumbres". Cualquier territorio del Archipiélago ofrece una variedad turística amplia, reitera el catedrático de Historia del Arte de la ULL, que añade que hoy, más que nunca, está empezando a surgir un mayor interés por nuestra cultura, por nuestra historia.

Difundir la Historia

"¿Quién no se emociona paseando por la calle Real de Santa Cruz de La Palma o a quién no le gusta estar en la plaza de Santo Domingo, en Vegueta, en la plaza del Adelantado de La Laguna o entrar en la iglesia de la Asunción de San Sebastián de La Gomera y sentirse Cristóbal Colón? Tenemos historia y tenemos la obligación de difundirla entre nuestros visitantes", indicó el director del curso.

Sólo por citar un ejemplo de ese turismo alternativo, propone que en La Gomera se potencie, especialmente, el llamado itinerario colombino, que empieza por la Torre del Conde, continúa por el pozo de la Aguada, la iglesia de la Asunción, la Casa de Colón y concluye en la ermita de San Sebastián.

El catedrático no cree que en las Islas exista, como insisten algunas voces, un desconocimiento generalizado de nuestro patrimonio cultural. Sin embargo, "es ahora cuando nos estamos dando cuenta de los disparates que hemos cometido en el tiempo", matiza.