Santa Cruz cerró 2018 con las mejores cifras de separación de residuos en origen, con un alza significativa en la recogida selectiva de envases ligeros, papel cartón y aparatos electrónicos, según los datos aportados por la compañía concesionaria del servicio.

A la vista de los datos observados durante el pasado ejercicio, destaca el incremento en la recogida de envases ligeros en los contenedores amarillos, que experimenta una subida del 14,6% respecto a las cifras de 2017 al pasar de las 1,5 toneladas a las 1,81 toneladas recogidas en el año que acaba de concluir.

También sobresale la subida experimentada por el volumen de papel y cartón recogido en los contenedores azules que se encuentran en la vía pública. El crecimiento en esta materia durante 2018 ascendió un 10% respecto al año anterior, con un total de 2.603 toneladas frente a las 2.366 de 2017.

El concejal de Servicios Públicos, Dámaso Arteaga, atribuye la confirmación de esta tendencia positiva "a la mayor concienciación ciudadana en materia de reciclaje y al éxito de las campañas de sensibilización puestas en marcha durante los últimos meses".

Muy por encima de esos parámetros se situó también la recogida de residuos procedentes de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), que crecieron hasta un 25,4% gracias a las 115 toneladas recogidas el pasado año frente a las 92,1 toneladas de 2017. Estos dispositivos pueden depositarse, una vez que concluya su vida útil, en los contenedores rojos instalados en colegios públicos y dependencias municipales.

Del mismo modo, se incrementó el volumen de papel y cartón recogido en colegios y centros públicos, con un 7,8%, al totalizar 33 toneladas frente a las 30 toneladas del año 2017.