El Colegio Oficial de Psicología y el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife rubricaron este lunes un convenio marco de colaboración, en virtud del cual la capital tinerfeña contará con un servicio de atención psicológica ante situaciones potenciales de emergencias, crisis y catástrofes.

La firma del convenio se formalizó por parte de la primera teniente de alcalde y concejal de Seguridad, Zaida González, y de la decana en funciones del Colegio Oficial de Psicología de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Carmen María Linares.

Zaida González explicó tras el acto que "la intervención psicológica a víctimas de situaciones de emergencia es sumamente importante" y por eso desde el área municipal de Seguridad están "muy satisfechos" de contar a partir de ahora "con un equipo profesional y estable, dispuesto a prestar este servicio en el caso de que fuese necesario".

Además, recordó que "los estudios sobre los beneficios de la ayuda psicológica en estos supuestos confirman una influencia positiva sobre las reacciones psíquicas de la víctima, ayudándola a recuperar el equilibrio roto por la situación que está viviendo".

De hecho, "favorece la resolución de secuelas psicológicas que quedan después de un acontecimiento traumático, y repercute a su vez en el personal que interviene, facilitando la noción de control de la situación".

González reconoció también que "lo deseable es que este tipo de servicios no se tengan que activar nunca, pero lo razonable es estar prevenido y preparado por si ocurre alguna de estas situaciones y hoy Santa Cruz está preparada".

GRUPO DE INTERVENCIÓN

El convenio suscrito, que posee una vigencia inicial hasta 2019, si bien contiene una cláusula de renovación automática anual a voluntad de ambas partes, no representa coste económico alguno para la hacienda municipal.

Así, el Colegio Oficial pone a disposición del Ayuntamiento a su grupo de intervención psicológica en crisis, emergencias y desastres, que se activará en coordinación con el servicio de Protección Civil ante cualquier eventualidad de esta naturaleza que pudiera producirse en el municipio.

El objeto del convenio es precisamente el de regular las actuaciones de los profesionales del Grupo de Intervención Psicológica en Crisis y Emergencias (GIPEC) y establece que deberá ser Protección Civil quien determine si se debe o no activar.

En caso positivo, Protección Civil indicará al Colegio de Psicología la información de que disponga y lugar al que debe desplazarse el equipo.

El coordinador del Grupo, una vez recibida la activación por parte del Ayuntamiento, organizará el dispositivo de respuesta formado por profesionales que deberán lucir en todo momento chalecos de identificación y deberán filiar a todos los afectados a los que presten asistencia.

COLABORACIÓN

No obstante, el convenio va más allá de la respuesta en este tipo de situaciones, posibilitando una colaboración estrecha entre el Colegio y el área de Seguridad en materias como la formación, la elaboración de proyectos de intervención e investigación, la organización de jornadas y seminarios o la promoción mutua de la participación de sus profesionales en las diferentes actividades.

Por este motivo, ambas partes intercambiarán la información necesaria para la determinación de las áreas concretas de trabajo en las que existe interés en desarrollar proyectos conjuntos.

El convenio, que regula la existencia de una comisión de seguimiento, formaliza también el compromiso mutuo de mantener la confidencialidad y a no difundir, bajo ningún aspecto, los datos de carácter personal y las informaciones científicas o técnicas pertenecientes a la otra parte a las que haya podido tener acceso en el desarrollo de los convenios específicos siempre que esas informaciones no sean de dominio público.

Los datos, incluidos los de carácter personal, y los informes obtenidos durante la realización de los proyectos conjuntos, así como los resultados finales, tendrán carácter confidencial.