Indignación y crispación. Estos son los sentimientos exteriorizados por los colectivos que forman parte de la comisión Habla, Juntos por San Andrés como respuesta a los cambios en la limitación de velocidad que se introducirán a partir del próximo lunes en la autovía de San Andrés, entre el Dique del Este y la avenida, por parte del Cabildo de Tenerife, siendo una medida apoyada por la Dirección Provincial de Tráfico de la DGT y el propio Ayuntamiento de Santa Cruz.

En este caso, los vecinos critican esas medidas adoptadas por las administraciones con el objetivo de garantizar a los ciclistas y peatones que diariamente por la carretera, para lo que se procederá a fijar la velocidad a 60 km/h cuando hasta ahora está limitada a 90 km/h. Esta modificación también afectará a la propia categoría de la vía, que pasa de ser autovía a multicarril.

"Es impresentable lo que han hecho, y todo no por que sea una carretera peligrosa, como ayer mismo confirmaron ante los medios de comunicación los representantes de las administraciones, sino porque no han invertido en la carretera durante años vendiendo durante décadas un proyecto de carril-bici que nunca hacen. Es lamentable", aseguró uno de los miembros del colectivo visiblemente enfadado.

Sobre ello aseguró que se trata de un problema exclusivamente generado por las administraciones, porque no hacen las infraestructuras correctas "como puede ser la curva de El Sauzal o la Vía de Ronda, donde se ha limitado la velocidad por lo mal que están diseñadas".

"En este caso, la autovía se construyó como vía rápida y ahora por el modismo de la vida saludable y para dar respuesta a un determinado sector de moda se implementan estas medidas que lo que único hacen es perjudicar a los vecinos de Anaga, porque esto no solo afecta al pueblo, sino a todos ¿En contra de la seguridad? Rotundamente no, pero tampoco podemos aceptar, como dicen los medios, que no es un punto negro del viario de la Isla y que traguemos", añadió.

Explicó al respecto que los vecinos son los más perjudicados porque al final la reducción provocará más incomodidades a la hora de ir o volver al trabajo, salir de Anaga o acceder o regresar, teniendo en cuenta que "no es echarse una carrerita dominguera o hacer deporte diario. Es el día a día de vecinos que vivimos al otro lado".

Habla, Juntos por San Andrés puso en valor la idea de que "lo que ocurre es que siguen vendiendo la moto de proyectos de carril bici, más comodidad y todo eso que aparece cada vez que hay elecciones. Ahora no hay dinero para invertir en las infraestructuras y se les ocurre bajar la velocidad en una vía rápida, construida como tal, y que no es ningún punto negro del viario ni de Santa Cruz ni de la Isla en general".

Reclaman, al margen de mantener las condiciones actuales, que se hagan campañas informativas por parte de la Guardia Civil y la Policía Local sobre los ciclistas, un sector con miembros que no respetan espacios o las propias señales de tráfico, al igual que los conductores. "Pero lo fácil es defender el ocio y no el día a día de los vecinos", concluyó.