"Nosotros ya no podemos hacer mucho más. Entiendo que se tendrá que llegar a un consenso". Lo afirma Adriana Naranjo, presidenta de la Federación Canaria de Asociaciones de Animales y Plantas (Fecapap), la entidad que gestiona el albergue de Valle Colino. Con esa frase resume la compleja situación que afronta el refugio para animales, tras la falta de acuerdo que existe entre los cuatro municipios que deben hacer frente a su mantenimiento -La Laguna, Santa Cruz, El Rosario y Tegueste-, y ahora también con el Cabildo de Tenerife.

"Hemos llegado al límite. No podemos proseguir", continúa Naranjo, quien recalca que los ayuntamientos de La Laguna y Tegueste aún no han ingresado las cantidades correspondientes al año 2017. En el primer caso son unos 97.000 euros, y, en el segundo, unos 7.000. "No podemos seguir admitiendo animales, porque no hay dinero para alimentarlos, para alimentación, para cubrir los gastos de las clínicas veterinarias externas...", añade.

La presidenta de Fecapap reconoce que la preocupación "es muy grande" y destaca que este albergue de animales es "un referente". "Han venido, incluso, de otras islas y de otros municipios a ver cómo estábamos gestionando este albergue", asegura.

"Es un modelo por cuanto no nos dedicamos solo a recoger a los animales y entregarlos en adopción, sino que nuestra gestión va mucho más allá: casi estamos abiertos las 24 horas del día y hacemos charlas de concienciación en colegios", sostiene. "Todo eso, sin dinero, no se va a poder hacer", advierte.

Adriana Naranjo recuerda que de Valle Colino dependen diez puestos de trabajo directos, más otros indirectos. "Toda la dinamización de la zona de Finca España, en la que hay un montón de negocios en los que nosotros compramos, se va a ver afectada", apunta.

La presidenta de Fecapap puntualiza que en Valle Colino se recogen al año unos 2.700 animales, entre perros, gatos y "otros". "Hemos estado recogiendo gallinas, patos, cerdos, ovejas, caballos...", subraya. "Y nos hemos buscado la vida para recolocarlos porque no tenemos instalaciones para ellos", añade.

"Todos los huecos que había por cubrir están ocupados. Incluso hemos tenido que hacer una campaña de crowdfunding para comprar jaulones móviles para meter ahí perros o gatos extraviados que hay que devolver", concreta. Al año son más de 500.

En estos momentos, Valle Colino alberga unos 260 perros y 66 gatos.

La pasada semana, este periódico se hizo eco de las dificultades que existían para que los ayuntamientos citados se pusieran de acuerdo en la gestión del albergue, y también de la negativa del Cabildo a afrontar esa tarea, tal y como le demandan los consistorios. Respecto a este asunto, Naranjo se muestra clara: "Falta voluntad política. Han ido dejando de lado este asunto y llega un momento en el que nosotros no podemos hacer milagros. Y a nosotros nos da igual quién lo haga, pero que lo hagan".