Una calle de Santa Cruz llevará el nombre de Julia Gil López, docente y poetisa chicharrera fallecida el pasado mes de junio.

El pleno del Ayuntamiento ha aprobado hoy el preceptivo expediente de honores y distinciones, en reconocimiento a "esta creadora del verso que, con su arte y el anhelo de un mundo mejor, dio vida a la palabra".

La calle se encuentra en la intersección de la Avenida Venezuela con la Benahoare, en el barrio de La Salud.

El acuerdo señala que "esta escritora llena de humanidad, con sus poemas de aparente sencillez, pero con un discurso sugerente y mágico, abordó diversos temas y situaciones, algunas tan dramáticas como la de los inmigrantes que han llegado en pateras a nuestras costas".

Dedicada durante toda su vida a la enseñanza de la lengua y la literatura, y a su familia como madre de cuatro hijos, comenzó a publicar muy tarde, cuando por fin pudo disponer de algún tiempo para ello.

Varias de sus obras están relacionadas con sus actividades como pacifista y de apoyo a movimientos de solidaridad internacional, recuerda el Ayuntamiento en un comunicado.

Admiradora de Juan Ramón Jiménez, Julia Gil dedicó su memoria de licenciatura (El mar en la poesía de Juan Ramón Jiménez) al que calificó como "uno de los más totales y profundos cantores del mar en nuestra literatura".

Julia Gil estudió Filología Románica en la Universidad de La Laguna, con 24 años entró como profesora interina en el instituto Tomás Iriarte de Santa Cruz de Tenerife y en 1963 sacó la oposición de Agregada de Lengua y Literatura Española en Jaén, donde permanece un curso.

De allí a Las Palmas de Gran Canaria y a Madrid, donde prepara la cátedra, que obtiene en 1967, y a Santa Cruz de La Palma para retornar al año siguiente a Tenerife.

El Pleno también aprobó hoy la concesión de la Medalla de Oro al Mérito Deportivo a los regatistas Alicia Cebrián Martínez de Lago y Javier Hernández Cebrián.

El Pleno destaca que la "la regatista isleña une a su espléndido nivel deportivo y alta capacidad competitiva un compromiso destacado con su ciudad natal, de la que se ha convertido en embajadora en todo el mundo, promocionando sus atractivos en cuanta ocasión se le presenta".

De igual modo, Alicia Cebrián ha colaborado con importantes iniciativas para Santa Cruz, como la puesta en marcha de la nueva marca ciudad, acto en el que protagonizó un emotivo retrato de la ciudad vista desde el mar.

Por otro parte, Javier Hernández Cebrián (Santa Cruz de Tenerife, 1983), de acuerdo con los términos del expediente aprobado hoy, "en una tierra acostumbrada a navegantes de notable éxito y nivel competitivo, ha sido el regatista isleño más brillante de los últimos tiempos. Por dos veces consecutivas logró el sueño de que Santa Cruz tuviera una representación olímpica, en la clase Laser".

Hernández, que participó en Pekín 2008 y Londres 2012, y que está en la actualidad retirado de la alta competición, vivió los últimos Juegos de Río de Janeiro desde la posición de entrenador, trabajando para países extranjeros, pero sin perder de vista lo que hacen los deportistas del Archipiélago y todos los españoles.