A los toscaleros les gusta la fiesta, pero no habían tenido hasta ahora un momento en el calendario anual que les permitiera juntarse para hablar de su barrio o recordar el escenario de su infancia. El que hay y habrá siempre es el de la procesión del Señor de las Tribulaciones en Semana Santa, pero hacía falta una conmemoración "más alegre". Y ya existe desde el año pasado. Se trata de la recreación del paseo romero del Cristo de Paso Alto, que anoche celebró su segunda edición organizada por el Distrito Centro-Ifara que preside el edil José Carlos Acha. Folclore, música clásica y ayer, romería, con el Museo de Almeida como centro y eje.

La tradición recuperada responde a la costumbre de los vecinos de El Toscal de agradecer la protección que dio la imagen del Cristo durante el ataque del contralmirante inglés Horacio Nelson.

Hasta 41 bombas cayeron sobre el castillo de Paso Alto aquel 25 de julio de 1797, sin que ninguna lograse dañar el cuadro que se encontraba en su interior.

Los integrantes de la Asociación de Recreadores del 25 de Julio se concentraron a media tarde junto a la cruz de San Agustín, en la esquina de las calles San Francisco y La Marina, junto a distintos grupos folclóricos. Allí se ofició un emocionado responso en memoria de los vecinos fallecidos y se colocó un ramo de flores.

El paseo romero discurrió por la glorieta Arquitecto Marrero Regalado hasta Almeida, donde se celebró una misa canaria con un momento álgido: las folías alusivas a la figura del Cristo.

Hoy, durante todo el día está programado en las canchas deportivas el Festival Pisaca Fest, una jornada lúdica pensada para toda la familia con actividades, comida y actuaciones como la de las murgas La Traviata y Ni Pico Ni Corto. Llegó la fiesta de El Toscal.