Ayer se confirmó lo que desde la semana pasada era casi un secreto a voces: los dueños de los quioscos Lucas y T5, establecimientos "de toda la vida" de la playa de Las Teresitas, tendrán dos de los once puestos sorteados por el Ayuntamiento de la capital para dar servicio a la instalación durante los próximos dos meses (10 de junio-11 de agosto).
La renuncia de dos adjudicatarios -el 7 y el 11- en el sorteo realizado el pasado martes, tal y como avanzó este periódico en su edición del viernes, permitirá a los propietarios de los establecimientos citados instalar sendos autobares en la línea de aparcamientos más alejada de la arena.
A estas bajas voluntarias se suman otras tres -15, 17 y 19- en el listado de suplentes que configuró el consistorio tras el reparto de los puestos, según confirmó ayer el concejal de Infraestructuras, José Alberto Díaz Estébanez. En este caso, los adjudicatarios de licencia ni siquiera presentaron la documentación correspondiente. De esta forma, en la lista de reserva quedan ahora el 14, el 16, el 18 y el 20.
Con la entrada del Lucas y el T5, solo dos de los chiringuitos de "toda la vida" de Las Teresitas se quedan sin posibilidad, al menos de momento, de instalar un autobar en la playa, el Rivero y el Difrutas. Eso sí, este último sigue abierto en su punto de siempre, en la línea de arena, pues la tramitación del expediente que, con toda probabilidad, llevará a su precinto, ha seguido un camino más lento que el resto.
El sorteo de los puestos volverá a repetirse dentro de dos meses para el periodo agosto-octubre.
Mientras tanto, y según recalcó ayer Díaz Estébanez, el consistorio seguirá trabajando en el concurso de los quioscos definitivos. Es más, el ayuntamiento ya ha remitido a la Dirección General de Costas el proyecto final, con las precisiones técnicas que solicitaba el departamento estatal, pidiendo la autorización.
En este sentido, el alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, señaló que espera que los nuevos establecimientos en la zona de arena de la playa "puedan entrar en funcionamiento en Semana Santa de 2018, ya que, desgraciadamente, no será posible este verano".
Bermúdez admitió, no obstante, que el proceso "es largo".
"Recuperar el dinero"
El alcalde Bermúdez reafirmó ayer que su objetivo es "recuperar el dinero de la compraventa de Las Teresitas". Sobre la vistilla judicial del próximo viernes, donde se analizará la ejecución de la sentencia, indicó que "ahí deberá aclararse todo" y reiteró que ha encargado a los servicios jurídicos que "defiendan el interés general, camino que iniciamos ya en noviembre de 2011". "Hay mucha gente metida a abogado, confiamos en los letrados que determinarán si pedimos la ejecución provisional y cuándo", reiteró para valorar: "Lo que ya ha quedado demostrado es que no había plazos para solicitarla como decía la oposición", Sobre si los condenados tienen solvencia para afrontar el pago, aclaró: "No lo sé ni creo que tampoco tenga por qué saberlo".