"Que acaben cuanto antes y vengan del Ayuntamiento de Santa Cruz para dialogar con el pequeño comercio de la zona o pongan un coordinador de obra. Ni sabemos bien lo que quieren hacer ni nos informan. Y en apenas quince días ya han cerrado tres negocios: un bar, un rent a car y un alquiler de bicicletas". La frase resume el sentimiento de los empresarios de la calle Méndez Núñez donde se amplían las aceras hace un mes. Para evitar "las represalias que han tomado conmigo", según uno de los propietarios, EL DÍA dialogó ayer con una decena para ofrecer un testimonio colectivo.

"Ayer (por el lunes) empezaron sin avisar a empichar otro tramo, de la esquina de La Tolerancia hacia abajo. Han quitado todavía más aparcamientos y ya es una situación casi desesperada", valoraron en un comercio. De farmacias a herbolarios, cafeterías o tiendas de deportes, las quejas se multiplican: "Han cortado varias veces el agua sin avisar porque rompen tuberías y nos hemos quedado sin actividad". Un encargado apunta: "Nos quejaremos al seguro porque llevamos poco tiempo aquí".

El dueño de un bar critica: "Nos dejaron encerrados de tramo a tramo sin pasos para peatones". Un vecino tercia: "Lo pusieron ayer (el lunes), está lleno de clavos y era un barrizal el primer día".

Algo más allá, la imaginación al poder: "Vivimos gracias a la segunda fila, ahora desaparecida. Por eso, hemos creado el servicio mcauto: el cliente pasa en coche, salimos rápido para darle la mercancía y ya nos pagará luego".

La encargada de un local sentencia: "Tenemos al personal limpiando estanterías porque no entra nadie. Un gran desastre". En un estanco apuntan: "Desde más allá del parque invitan a no seguir porque solo pueden pasar residentes. Nos espantan los clientes. Si no nos mata la obra, nos matan las señales". Reconocen que "trabajan de siete y media de la mañana a siete de la tarde" y que "todas las obras son molestas, pero si tienen motivación. Hay muchas más necesidades en El Toscal".

Señalan las fuentes que "la gente mayor tiene miedo a salir de casa entre tanta reja. Si vemos caídas sin ellas, cómo no con la obra". Tampoco se fían de los plazos: "Dicen que ocho meses, pero encuentran cosas enterradas ahí hace cincuenta años".

Reclaman más información: "Mucha gente con chalecos y cascos, pero nadie sabe nada. No tienen empatía con la gente".

"Obras para mejorar"

El concejal de Obras, José Alberto Díaz-Estébanez, apeló ayer en la SER a "la deuda histórica con El Toscal que tiene dos vías fundamentales: La Rosa y Méndez Núñez. Planteamos la mejora y ampliación de esta última, también en servicios. Tras reuniones y dos asambleas, con el consenso de vecinos y comerciantes que solicitaron no iniciar las obras hasta después de Navidad. Entiendo las molestias y pedimos disculpas, pero es como una obra en el baño de casa. No se podrá utilizar mientras tanto, pero quedará mejor. Aquí pasará lo mismo".