La antigua fábrica Celgán de la capital tinerfeña vuelve a estar ocupada por seis personas sin recursos, pese a que el ayuntamiento se comprometió hace más de un año a su demolición por riesgo de derrumbamiento.

Miembros del Proyecto Hoy están en estos momentos dotando a los inquilinos de cobertura sanitaria, abrigo y alimentos. Además, están realizando continuas visitas para intentar mediar con las instituciones y lograr un desalojo inminente del inmueble.

El pasado año quince personas habitaban en el viejo edificio, que ya había sufrido desprendimientos en su patio interior, hasta que el Proyecto Hoy puso en conocimiento del ayuntamiento las condiciones en las que se encontraban y medió para buscar una solución. Durante ese período la organización también suplió las necesidades básicas de los okupas, hasta que en el mes de febrero del año pasado se produjo un realojo de las personas que allí habitaban a viviendas de alquiler social y a distintos albergues.

La corporación municipal se comprometió en aquel entonces a derrumbar la antigua fábrica pero, pese a ello, la zona se encuentra aún en el mismo estado e iguales condiciones de accesibilidad que hace ya más de un año.

Desde el Proyecto Hoy afirman que "hay buena predisposición por parte de los actuales ocupas para abandonar el inmueble y que las negociaciones con el Instituto de Atención Social (IMAS) van por buen camino" pero también creen que la fábrica puede volver a ser ocupada".

Por su parte, la Gerencia de Urbanismo declara que "el proceso de demolición lleva un largo camino" y que "ahora mismo se está realizando un proyecto técnico". Afirman que esperan que se desarrolle con la mayor celeridad posible.