La Comisión de Evaluación Ambiental de La Palma, la nueva "Cotmac insular", ha aprobado una instrucción por la que se facilita o agiliza el desarrollo de proyectos en la Red Natura 2000.

Se tratan de actuaciones en espacios protegidos cuya finalidad es garantizar el buen estado de conservación de especies y hábitats. En concreto, La Palma cuenta con 30 espacios calificados como Zonas Especiales de Conservación (ZEC) en el ámbito terrestre y otras dos en el marino, además de ocho espacios declarados como Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que suponen aproximadamente la mitad del territorio insular.

La nueva instrucción pretende clarificar los procedimientos y la documentación necesaria que han de aportar los promotores para que este órgano determine la procedencia o no de la evaluación de impacto ambiental. A propósito, el consejero de Planificación señaló que "si el proyecto o actuación que se pretende ejecutar consiste en la reparación o mantenimiento de infraestructuras ya existentes se entiende que no afecta de forma apreciable a la Red Natura 2000 y, por tanto, que está exento del procedimiento de evaluación ambiental, no siendo necesario remitir documentación alguna a la Comisión de Evaluación Ambiental, siempre y cuando se cumplan los condicionantes establecidos".

En concreto, se refiere a que la instrucción deja vía libre a actuaciones que no conlleven modificación en el trazado o en la volumetría, que no implique ocupación ni transformación de nuevo suelo, que no suponga la apertura de nuevos accesos o que no conlleve el asfaltado o impermeabilización del suelo. Se determinan además los pasos que se deben dar en cada uno de los proyectos para la realización de la evaluación ambiental si fuera precisa.

En principio, la práctica determinará si existe "letra pequeña", los beneficiarios directos de esta decisión podría ser pequeños agricultores y ganaderos que para el mantenimiento de sus instalaciones no precisarán evaluaciones de impacto, en zonas como Amagar, El Tablado, la parte alta de Tamanca, Los Charcos en Fuencaliente o viñedos en Puntagorda, Tijarafe y Garafía, entre otros. Lo mismo ocurrirá con el mantenimiento de obras hidráulicas, mantenimiento de senderos o cortafuegos que pasan por esos espacios, y que no han de ser llevados al órgano ambiental.