El grupo de gobierno (UPF-PSOE) en el Ayuntamiento de Fuencaliente presentó al Pleno el presupuesto de 2018 el pasado 31 de octubre, cuando apenas faltan dos meses para acabar el año, con un 90% del dinero ya invertido o comprometido, sin margen real para presentar enmiendas, por lo que la oposición (CC-SSP), que son mayoría, decidieron oponerse y "tumbar" las cuentas.

La reacción de UPF fue iniciar una campaña vía WhatsApp intentando desprestigiar al portavoz de CC, Gregorio Alonso, y al concejal de SSP, Eduardo Pérez, a los que acusan de "dejar a los estudiantes sin ayudas al estudio y sin acogida temprana, impedir que se ingresen las subvenciones a clubes deportivos, ni ayudas a las AMPA...", lo que deja al descubierto que cuando apenas faltan dos meses para finalizar el año las partidas en favor de todos estos colectivos están sin ejecutar.

Eduardo Pérez ha dejado claro que "todo lo que se ha dicho es mentira. Las partidas son prorrogable porque estaban recogidas en el presupuesto de 2017. Juridisprudencia al respecto existe toda la que se quiera. Hemos solicitado al secretario y a intervención que se emita un informe al respecto".

Aclara que "es prorrogable todo lo que tenga continuidad. Los programas o subvenciones a asociaciones que desarrollan una labor pueden ser abonadas. Lo que ocurre es que las ayudas y subvenciones las han dejado para el final. Hablan de estar en peligro la acogida temprana, cuando se ha venido realizando el pago durante todo el año sin presupuesto".

Eduardo Pérez explica que el presupuesto municipal "llega a una altura del año en la que no hay posibilidades reales de presentar enmiendas que sean contempladas y se puedan ejecutar. En caso de ser aprobados, no entrarían en vigor hasta diciembre". Y es que "llevan unas cuentas al Pleno por valor de 3,9 millones, de los que ya están ejecutados o comprometidos 3,5. Lo que queda es para las nóminas de los trabajadores y poco más".

El edil de SSP deja claro que "no compartíamos la filosofía del documento porque se quedaba cojo para el desarrollo del municipio", afirman que "las partidas opacas que se utilizan como cajón de sastre, para mover el dinero de un lado y para el otro, se han visto aumentadas". "Nos traen un presupuesto de esa manera y pretenden que se apruebe", sentencia.