El Cabildo de La Palma ha finalizado 13 de las 14 obras previstas en zonas en las que existía un claro riesgo para la población ante la posibilidad de riadas, por la pérdida de la capa vegetal del terreno por el incendio forestal del verano de 2016. El coste de la ejecución de los trabajos ha superado los 5,3 millones de euros, de los que el 80% han sido financiados con cargo al Fondo de Desarrollo de Canarias.

Las obras se han ejecutado en otoño e invierno, aunque con la fortuna de que no se registraron precipitaciones de envergadura en momentos clave. Sí hubo, tal y como reconoció el vicepresidente insular y responsable de Aguas, José Luis Perestelo, "seis momentos meteorológicos adversos", aunque el efecto fue positivo: "se demostró la efectividad de los trabajos que se estaban realizando".

Se llevaron a cabo obras en Fuencaliente consistentes en el encauzamiento de los barrancos de Los Camachos, Las Indias, Casa Arte Cuadrado y La Crucita; en El Paso se han realizado la mayoría de los trabajos en Cabeza de Vaca, mientras en Villa de Mazo se actuó en Puente Roto (Tigalate) y en el barranco de Tiguerorte. Por último, en Los Llanos de Aridane las acciones se centraron en El Remo, una de ellas sin acabar.

En el acto de presentación de la finalización de las obras estuvieron presentes representantes de los diferentes ayuntamientos afectados, que agradecieron la labor de la institución insular. Ni tan siquiera el concejal de Obras de Los Llanos de Aridane, Manuel Perera, se saltó el guión, a pesar de las criticas reiteradas de la alcaldesa, Noelia García (PP), con la situación de incomunicación que con las escorrentías vive El Remo. Ayer, como si nada hubiera ocurrido. Es más, casi desmienten los rifirrafes que han sido públicos.

El presidente insular, Anselmo Pestana, recordó que los trabajos "han sido dirigidos y ejecutados por profesionales de La Palma", y se mostró "muy satisfecho de ver materializadas unas excelentes obras de ingeniería". Eso sí, reconoció que "algunas obras se han podido ejecutar antes", aunque hizo especial hincapié "en las dificultades orográficas" en las que se han llevado a cabo algunas de las actuaciones.

A propósito, Perestelo llegó a agradecer "la solidaridad" de vecinos "a los que hemos tenido que invadir propiedades, que han llegado incluso a ceder, para la ejecución de los trabajos".

Además de las actuaciones ya ejecutadas, los representantes del Cabildo de La Palma reconocieron que hay otras dos obras que consideran "prioritarias" para evitar que zonas poblacionales de Los Llanos de Aridane y Villa de Mazo puedan quedar incomunicadas por las riadas, tal y como ya ha ocurrido durante estos meses. A propósito, Jorge González, consejero insular de Infraestructuras, se refirió al núcleo costero aridanense de El Remo, en cuya vía de acceso se construirá un puente para que las escorrentías sean encauzadas por debajo de la carretera. "Se trata de una obra de unos dos millones de euros", anunció, y cuyo proyecto "estará redactado en uno o dos meses". La idea de la institución insular es que a lo largo de este año la obra pueda ser licitada. En el mismo sentido, González se refirió a los problemas que también tienen por escorrentías los vecinos de La Salemera, en Villa de Mazo, e incluso el acceso al complejo ambiental de Los Morenos, en Villa de Mazo. Aquí "debemos actuar en tres tramos diferentes", señaló, para que el agua no afecte a la circulación de los vehículos. El proyecto "ya está redactado" e incluso podría ejecutarse a través del Fondo de Desarrollo de Canarias. Tiene un presupuesto estimado de unos tres millones.