La principal vía de acceso a la Isla Baja, la carretera TF-42, se reabrió ayer al tráfico tras permanecer más de 48 horas cerrada tras el desprendimiento de la tarde del 31 de diciembre de 2018. El Cabildo de Tenerife mantuvo la vía abierta durante casi toda la jornada, pero entre las 22:30 y las 6:00 horas fue necesario establecer cortes intermitentes, en ambos sentidos, para continuar con los trabajos nocturnos de reparación de daños.

Fuentes del área insular de Carreteras explicaron ayer a EL DÍA que la previsión de los técnicos es que la vía recupere la normalidad en la jornada de hoy. En principio, no está previsto continuar con más trabajos nocturnos en los próximos días.

Un grave desprendimiento, que se produjo en torno a las seis de la tarde del último día de 2018, obligó a cortar la vía en ambos sentidos. El tráfico se desvió a través del anillo insular, la carretera antigua de El Tanque y la sinuosa carretera de Las Cruces, lo que generó problemas sobre todo en el transporte público y de mercancías.

La TF-42 quedó abierta en sentido hacia Garachico poco después de las siete de la mañana de ayer, según anunció el área insular de Carreteras a través de la red social Twitter. Los carriles en sentido Icod, los más cercanos al talud, se reabrieron poco antes de las nueve de la mañana.