La plaza del Ayuntamiento de La Orotava tiene más de un siglo de historia. Más de 106 años de uso que habían causado multitud de desperfectos que ahora, tras los últimos trabajos de restauración coordinados por el consistorio, dejan paso a una imagen renovada, pero muy respetuosa con el diseño original.

Los 320.000 euros invertidos por la empresa concesionaria del servicio de alumbrado público (250.000 euros) y el ayuntamiento (70.000 euros) han permitido instalar nuevas farolas que son réplicas casi exactas de las originales -solo se ha modificado la longitud de los brazos para evitar la contaminación lumínica adaptarlas a la Ley del Cielo de Canarias-, restaurar los escudos de los bancos, sacar a la luz los antiguos remates de piedra o recuperar el diseño de los antiguos jardines.

La propia plaza fue escenario ayer de la presentación de la finalización de la primera fase de los trabajos que, en prácticamente un año, han restaurado el epicentro de algunos de los principales actos de las fiestas villeras. El edil de Servicios, Felipe David Benítez (CC), remarcó que la actuación ha permitido que el recinto cuente con un nuevo sistema de iluminación, mucho más moderno y eficiente.

El director técnico de la empresa encargada de realizar las réplicas de las antiguas farolas, José Moreno, detalló el laborioso proceso que se tuvo que seguir para, a partir de un modelado 3D y de un trabajo artesanal en madera, preparar los moldes que permitieron llevar a fundición las nuevas farolas, que tienen los mismos adornos florales que las instaladas en 1912 por el arquitecto Mariano Estanga.

El técnico municipal Pablo Torres subrayó que todos los trabajos ejecutados en la plaza se consensuaron con el Consejo Municipal de Patrimonio Histórico, que dio el visto bueno a la elaboración de réplicas de las farolas, adaptadas a la normativa vigente.

El alcalde villero, Francisco Linares (CC), puso en valor el trabajo "minucioso, riguroso y respetuoso con la historia de este lugar, que ha sido testigo de numerosos hechos históricos".

Tras esta renovación, que ha incluido también la pintura de muros y balaustradas, Linares animó a los vecinos a "darle más vida a esta plaza", donde aún resta por ejecutar los trabajos de renovación del deteriorado pavimento.

Labor artesanal con las farolas

La labor de recuperar las antiguas farolas de la plaza ha requerido un laborioso trabajo artesanal, ya que ha sido necesario hacer una reproducción exacta de cada uno de los adornos.

Escudos heráldicos reconstruidos

Los escudos heráldicos que adornan los bancos han sido reconstruidos gracias a la elaboración de moldes que han permitido recuperar elementos perdidos con el paso del tiempo.

El pavimento, tarea pendiente para el próximo mandato

Acondicionar el deteriorado pavimento de la plaza del Ayuntamiento villero es la última tarea pendiente en el proceso de restauración de este emblemático recinto público. Según anunció ayer el alcalde, Francisco Linares (CC), esta tarea quedará pendiente para el próximo mandato. La actuación, cuyo coste no está ni siquiera estimado, supondrá una inversión superior a la realizada hasta la fecha, puesto que toca actuar en una superficie de casi mil metros cuadrados. Linares recalcó que "pese a que la actual imagen de las baldosas es gris y blanca, originalmente eran blancas y negras". Cualquier intervención en el pavimento de la plaza debe contar con el visto bueno del Consejo Municipal de Patrimonio Histórico de La Orotava, tal y como ha sucedido con las obras ejecutadas en el resto de elementos de la emblemática plaza del ayuntamiento.