El consejero de Turismo del Cabildo de Tenerife, Alberto Bernabé (CC), asegura a EL DÍA que la administración insular ha recibido una única oferta para optar al arrendamiento, rehabilitación y explotación del antiguo y emblemático hotel Taoro, en el Puerto de la Cruz, pero matiza que la documentación administrativa aportada "está incompleta". Se ha dado un plazo de diez días al ofertante para que entregue los documentos que faltan y, si no lo hace, el concurso volvería a quedar desierto.

El Cabildo sacó a concurso el arrendamiento de este antiguo hotel, fundado en 1890, en abril de 2017. El plazo de entrega de ofertas se amplió en octubre del año pasado hasta enero de 2018 y se modificaron algunas condiciones de los pliegos. En esos nueve meses, "varias empresas han mostrado interés y se han producido varias visitas al inmueble", asegura Bernabé, "pero finalmente solo se presentó una propuesta concreta".

"Existen dudas sobre la capacidad de representación del grupo inversor por parte de la persona que ha presentado la oferta. Si no se aclara eso, no se abrirá el segundo sobre, el de la propuesta técnica, y habrá que volver a declarar desierto el concurso", avanza Bernabé.

Si fracasa este intento, la intención del Cabildo es volver a preparar un nuevo concurso que haga más atractiva la explotación del antiguo hotel Taoro. "No tiramos la toalla y estamos convencidos de que al final va a salir. En esta ocasión hemos sacado a concurso el hotel y una parcela anexa, pero si fuera necesario volver a intentarlo, nuestra apuesta sería sumar a todo esto el palacio de congresos anexo", anuncia Alberto Bernabé.

Para evitar el retraso del concurso convocado en el año 2017, el Cabildo optó por dejar fuera del lote el palacio de congresos. Un atractivo que, a juicio de Bernabé, podría resultar clave en el futuro para lograr una esperada adjudicación que se resiste desde hace ya una década.

El edificio del antiguo hotel y casino Taoro, ubicado en el Puerto de la Cruz, parece abocado, salvo sorpresa mayúscula, a un quinto intento para tratar de adjudicarlo. Según el consejero insular de Turismo, Alberto Bernabé, se trataría oficialmente de un cuarto concurso, "ya que hubo un procedimiento anterior que se inició pero no llegó a convocarse".

Bernabé ha insistido a EL DÍA en que si el concurso actual fracasa, la administración insular hará un nuevo esfuerzo para lograr que alguna empresa o grupo inversor apueste por la recuperación del antiguo hotel Taoro para uso turístico, como establecimiento de lujo.

El Cabildo lleva ya una década intentando que algún promotor asuma el arrendamiento, rehabilitación y explotación de este antiguo hotel. En 2008 se anunció que el primer concurso había quedado desierto y, desde entonces, se ha tratado de hacer más atractiva la oferta, pero sin lograr concretar nada.

El último intento, anunciado en abril de 2017 y prorrogado en octubre, planteaba un contrato de arrendamiento de 60 años, con un canon anual de 941.000 euros, que no se pagaría hasta compensar la inversión realizada, por un máximo de 28,2 millones. Esta compensación del canon permitiría a un inversor que alcanzara ese tope no pagar nada en concepto de arrendamiento durante 28 años.

El Taoro, inaugurado a finales del siglo XIX, sigue esperando para reconvertirse en un cinco estrellas con 200 habitaciones.