El portavoz socialista en el Ayuntamiento de El Sauzal, Francisco Goya, considera que la actitud del alcalde, Mariano Pérez (CC), respecto a la recepción de la urbanización de La Baranda es "irresponsable", y le pide que "recapacite y sea más prudente". A su juicio, "es una irresponsabilidad" afirmar en EL DÍA que "la única solución al conflicto es que los vecinos afronten una derrama de entre 600 y 1.200 euros".

Goya entiende que esas comunicaciones "deben hacerse de manera formal, pero solo cuando realmente se haya alcanzado un acuerdo". En su opinión, "la actitud del alcalde da por zanjada cualquier negociación y solo aumenta la brecha entre ambas partes".

El líder del PSOE muestra una "seria preocupación" porque "parece que son los técnicos quienes deben aceptar la recepción, pues eso genera serias dudas sobre si El Sauzal posee un gobierno real o está gobernado por técnicos que se exceden en sus funciones".

El edil recuerda al alcalde que "más allá de lo que ha afirmado existen otras realidades, como que el convenio anterior reconoce que la solución de las deficiencias que recoge era el primer paso para la recepción. O que las nuevas deficiencias surgen tras diez años de omisión por parte del gobierno de la obligación recogida en el convenio de continuar el proceso".

Según Goya, "este asunto es más complejo de lo que el alcalde afirma" y teme que "la intención de firmar un nuevo convenio sea dar por finalizado el de 2006, cuyo principal incumplidor ha sido el propio ayuntamiento".

El concejal recuerda que "el PSOE ha intentado mantener una postura alejada del conflicto para facilitar la negociación, pero esta intervención tan irresponsable, por parte de un alcalde que aún no ha resuelto las negociaciones, abre la puerta a que se hable del conflicto y también del trasfondo".

"Técnicamente es probable que todas las partes tengan que aportar algo para resolver las deficiencias, pero no creo que exista una voluntad real del gobierno local, y mucho menos del alcalde, de alcanzar acuerdos para una recepción justa", sentencia Goya.