El barrio de La Montañeta, en las medianías altas del municipio de Garachico, celebró este fin de semana sus fiestas en honor a San Francisco de Asís y a la Virgen del Rosario con calma, pese a la suspensión de todos los actos no religiosos, y con esperanza en que la situación no se repita en ediciones de años venideros. La prohibición de organizar verbenas el viernes y el sábado, por las limitaciones a los ruidos que impone el PRUG del Parque Natural de Corona Forestal, motivó que la Comisión de Fiestas anulara el resto del programa. Hubo amago de protesta, pero finalmente el barrio celebró su fiesta en paz. Sin más actos que la misa y procesión.

La llamada, a través de mensajes de Whatsapp a responder con parrandas a la legislación vigente en la corona forestal, no tuvo la respuesta esperada. En la noche del sábado apenas 40 personas se dieron cita en la plaza de San Francisco. Fieles a la cita anual. Y repartidos en diferentes grupos, que acamparon por los alrededores.

En la jornada de ayer, misa y posterior procesión. Y al regreso de las imágenes a la ermita, Saturnino, un vecino de La Montañeta, ejerció de portavoz popular y pidió que se "haga lo que se tenga que hacer para que no se pierda el esplendor que la fiesta siempre tuvo".