El rey Juan Carlos celebrará mañana, sábado, su 81 aniversario, después de que durante 2018 se le rindieran diversos homenajes por el 80 cumpleaños, el último de ellos, en el acto del Congreso con el que se conmemoró la Constitución cuatro décadas después de su aprobación en referéndum.

Don Juan Carlos festejará de forma privada el cumpleaños puesto que el primer acto oficial de 2019 que se ha incluido en la agenda de la Familia Real es la ceremonia de la Pascua Militar que tendrá lugar este domingo con la presencia de los reyes.

En esta ocasión, no está previsto que trascienda ninguna imagen de la celebración del aniversario de Juan Carlos I, como ocurrió hace un año, cuando la Casa Real divulgó una fotografía de familia tras el almuerzo al que asistieron alrededor de 70 personas en el Palacio de la Zarzuela.

En aquella comida, no participaron la infanta Cristina y sus cuatro hijos, que sí estuvieron, en cambio, en la que hubo el pasado 2 de noviembre por el 80 cumpleaños de la reina Sofía, de la que Zarzuela también distribuyó una fotografía.

El cumpleaños redondo de don Juan Carlos y doña Sofía dio pie a varios homenajes.

El primero fue en la ceremonia de la Pascua Militar, a la que ambos asistieron junto a don Felipe y doña Letizia después de que no lo hubieran hecho desde enero de 2014, meses antes de la abdicación.

En aquel acto, Felipe VI agradeció a su padre "tantos años de servicio leal a España" y su "ejemplo vistiendo con honor el uniforme" de militar.

El último homenaje tuvo lugar el pasado 6 de diciembre en el Congreso, donde el hemiciclo rindió una larga ovación a Juan Carlos I por su aportación a la democracia, a la que no se sumaron los diputados de Unidos Podemos.

En su intervención, don Felipe quiso reconocer el papel que desempeñó su padre para impulsar la democracia de manera "decisiva y determinante".

El anterior jefe del Estado ha tenido momentos delicados en el último año, como la intervención de rodilla a la que se sometió en abril para que se le sustituyera la prótesis artificial que se le implantó en la rodilla derecha.

Una posterior lesión de rodilla le impidió participar en verano en la Copa del Rey de vela en Palma junto a Felipe VI.

Semanas antes, se conocieron unas grabaciones en la que su amiga y empresaria Corinna zu Sayn-Wittgenstein le acusaba de tener cuentas en Suiza y de utilizarla como testaferro, lo que llevó a Unidos Podemos a pedir una comisión de investigación sobre los negocios del rey emérito.

El último episodio controvertido en el que se vio envuelto Juan Carlos I fue días antes del acto de la Constitución, cuando se divulgó una fotografía con su saludo al príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, en Abu Dabi durante el gran premio de Fórmula Uno.