El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, avanzó hoy que España se fijará metas más ambiciosas en reducción de emisiones contaminantes y, así, se propone recortar un 37 % los niveles actuales para 2030 y llegar en 2050 a rebajarlas en al menos un 90 %.

Sánchez expuso ese compromiso en su intervención en la sesión inaugural de la cumbre sobre el Cambio Climático (COP24) que se celebra en la ciudad polaca de Katowice.

El jefe del Ejecutivo español, quien acudió a la cumbre junto a su ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, subrayó que es necesario actuar más deprisa con las medidas para reducir emisiones.

En ese contexto, avanzó que "en breves días" su Gobierno presentará su proyecto de ley contra el cambio climático y transición energética.

Ante el resto de líderes y dirigentes de organizaciones internacionales presentes en este evento, Sánchez aseguró que España va a cumplir con el objetivo nacional de emisiones para 2020, pero precisó que su Gobierno quiere ir más lejos.

"Mi Gobierno apuesta con determinación por la eficiencia, las energías renovables y la movilidad eléctrica", resaltó antes de avanzar que fijará objetivos más claros y ambiciosos para 2030 y 2050.

A su juicio hay que ofrecer certidumbre y confianza no sólo a los inversores económicos, sino también a los ciudadanos.

Fue entonces cuando anunció la intención de reducir en un 37 % las actuales emisiones contaminantes en España para 2030 y, veinte años más tarde, en 2050, que se rebajen al menos un 90 % para alcanzar la neutralidad en el carbono.

Sánchez explicó que la calidad del aire, el impacto sobre los colectivos más vulnerables y la modernización de la industria son motores del compromiso de su Ejecutivo.

En consonancia con ello defendió la aprobación de un paquete de medidas para luchar contra el cambio climático y trabajar así en una senda viable de descarbonización de la economía.

A renglón seguido, dijo ser consciente del impacto de estas medidas en diversos territorios, sectores y colectivos más expuestos y en la necesidad de que haya una transición ecológica justa.

Por ello, aseguró que su Gobierno va a ser pionero en el diseño de una Estrategia Nacional de Transición Justa que tenga en cuenta el impacto en zonas específicas como las comarcas mineras.