El exministro de Justicia y responsable de este área del PP que ha negociado con el PSOE la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha subrayado la "extraordinaria" valía profesional del magistrado canario Manuel Marchena, que será "un magnífico" presidente del Tribunal Supremo y del CGPJ.

"Es un magistrado con una larga carrera, es el presidente de la sala segunda del Tribunal Supremo, por lo que me parece muy razonable que un presidente de sala pase a presidir el Supremo", ha opinado Catalá en declaraciones a Onda Cero.

De hecho, ha asegurado que el nombre de Marchena al frente del órgano de gobierno de los jueces y del alto tribunal tras presidir una sala del mismo supone "un mensaje de continuidad y solidez importantes".

No ve inconveniente ni ninguna "consecuencia práctica" que Marchena no vaya a ser, como así estaba previsto, el ponente de la sentencia del tribunal que juzgue la causa del "procés", porque "las reglas de sustitución harán que otro magistrado sea el ponente con las mismas garantías y seguridad jurídica".

Catalá ha confirmado que finalmente el Ejecutivo ha aceptado al candidato favorito del PP para presidir el CGPJ a cambio de que los partidos progresistas propongan once de los veinte miembros que conforman este órgano.

Sin embargo, el exministro ha señalado que ha habido un consenso con el PSOE en torno a los principales nombres, lo que ha permitido hacer una lista de candidatos "de lo más equilibrada y de magníficos profesionales".

Y ha añadido: "Esto de decir que los pone el PP o el PSOE es demasiado facilón. A magistrados con 40 años de carrera ponerles la etiqueta de si los ha puesto es PSOE o el PP creo que es muy poco cualitativo porque el asunto es bastante más complejo".

Fuentes del PP coinciden en que es un "gran acuerdo" y destacan que se haya logrado pese a que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dijo que "no quería saber nada de (Pablo) Casado".

Reconocen que ha habido cesiones de ambas partes para lograr un pacto que aún no está completamente cerrado. Según estas fuentes, las negociaciones siguen abiertas porque hay nombres propuestos por el PSOE que no convencen al cien por cien al PP.