El secretario de Política Económica y Empleo del PSOE, Manuel Escudero, ha detallado hoy que el impuesto sobre las transacciones financieras internacionales que proponen los socialistas para financiar las pensiones tendría un gravamen del 0,1 % con carácter general y del 0,01 % para operaciones con derivados.

En una entrevista en TVE, Escudero ha explicado que este impuesto, junto con el propuesto para la banca, ayudaría a "tapar el agujero" del sistema de la Seguridad Social, que cerró el año pasado con un déficit de 19.500 millones de euros.

Con esta propuesta, el PSOE busca "poner un poco de arena en los flujos financieros especulativos" y Escudero ha recordado que esa fue la finalidad con la que se diseñó la tasa Tobin.

"Invocamos hacer lo mismo que ha hecho Francia y, hasta que no se haga una directiva europea, vamos a practicar en nuestro país", ha explicado el responsable económico de los socialistas sobre esta medida que tiene una capacidad recaudatoria de 800 millones anuales para las arcas francesas.

Sobre si el impuesto será finalista o no, Escudero ha defendido que se trata de un planteamiento legal y no tanto político, pero ha asegurado que existirá un "compromiso político" por parte de un futuro gobierno socialista para que el montante de ambos gravámenes vaya directo a la Seguridad Social.