El Gobierno de España aseguró hoy que responderá con "reciprocidad" a la expulsión de su embajador en Venezuela, y garantizó que seguirá trabajando por "todas las vías" para mejorar la situación del pueblo venezolano.

El ministro español de Asuntos Exteriores y Cooperación, Alfonso Dastis, replicó así a la decisión del Gobierno de Nicolás Maduro de declarar persona "no grata" al embajador español en Caracas por las supuestas "agresiones" e "injerencias" del Ejecutivo de España en los asuntos internos de Venezuela.

Dastis, que recibió la noticia mientras participa en Davos (Suiza) en el Foro Económico Mundial, rechazó las acusaciones de "injerencia" lanzadas desde el Gobierno venezolano, y subrayó que lo único que ha hecho España desde el principio es "ayudar al proceso" de diálogo que se desarrolla en la República Dominicana entre el Ejecutivo de Maduro y la oposición venezolana.

El ministro español anunció también que este viernes llevará a la reunión del Consejo de Ministros en Madrid un informe con todas las alternativas a la decisión de Venezuela, y garantizó que el Gobierno que preside Mariano Rajoy va a actuar con "proporcionalidad" y "reciprocidad", aunque no concretó si se contempla la expulsión del embajador de Venezuela en España.

Dado que Venezuela ha planteado el asunto como una cuestión bilateral entre los dos países, Dastis dio por sentado que "alguna reacción bilateral" habrá que tomar.

Mientras tanto el embajador español en Caracas, Jesús Silva Fernández, permanece en Venezuela a la espera de indicaciones del Gobierno de Maduro, según informaron hoy a Efe fuentes de la embajada española en el país caribeño.

El diplomático español no ha recibido una notificación formal y de hecho se enteró de la noticia por los medios de comunicación, después de que el canciller venezolano, Jorge Arreaza, publicara la declaración de persona "no grata" en la red social Twitter.

Además, en el comunicado oficial el Gobierno de Caracas no ordena expresamente la expulsión de Silva ni fija plazos en este sentido.

Las relaciones diplomáticas entre España y Venezuela en los últimos meses han registrado fuertes enfrentamientos, pero la posición del Gobierno de Madrid, según explicó Dastis en Davos, ha sido siempre trabajar en la Unión Europea (UE) con "medios de presión e incentivos" en favor del diálogo entre el Ejecutivo de Maduro y la oposición.

El objetivo, según dijo Dastis, es que esa negociación que se desarrolla en la República Dominicana sea "efectiva", después de meses de conversaciones sin resultados concretos.

Dastis recordó además que las sanciones de la Unión Europea contra altos funcionarios venezolanos han sido aprobadas "por unanimidad" de los 28 miembros de la UE, y por tanto "no ha sido una cuestión solo de España".

Además de destacar el escepticismo de España ante el proceso de diálogo de Santo Domingo, Dastis insistió en que el Gobierno español tratará de ayudar "por todas las vías" a mejorar la situación del pueblo venezolano.

Durante su participación en el Foro de Davos el ministro español coincidió con el presidente de la República Dominicana, Danilo Medina, quien le pidió "fe en el diálogo" que mantienen el Gobierno de Maduro y la oposición, según relató el propio Dastis, para quien "la fe debe venir acompañada de buenas obras".

Fue precisamente el mandatario dominicano quien confirmó desde Davos que la nueva ronda de diálogo entre el Gobierno y la oposición de Venezuela se abrirá el 28 y 29 de enero, y señaló que este proceso de diálogo "es la mejor solución para Venezuela y para su gente".

Las relaciones diplomáticas entre España y Venezuela han atravesado algunos momentos de tensión en los últimos años. De hecho el embajador venezolano en España ha sido llamado en varias ocasiones al Ministerio español de Exteriores para expresar quejas del Gobierno de Madrid por insultos de Nicolás Maduro dirigidos al jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy.

Ayer, miércoles, Venezuela llamó precisamente a consultas a su embajador en Madrid, Mario Isea, debido a la "agresión injerencista y colonialista" del Gobierno español. Caracas también entregó este miércoles una nota de protesta a diplomáticos de la Unión Europea en respuesta a las sanciones aprobadas por Bruselas contra altos funcionarios venezolanos.