El exvicepresidente catalán Oriol Junqueras y los exconsellers de ERC encarcelados han pedido hoy al Tribunal Supremo (TS) que les tome declaración de nuevo y les deje en libertad, tras subrayar que acatan el artículo 155 y enmarcar su proyecto político en el "diálogo" dentro de la Constitución.

Los ocho consellers encarcelados y los líderes de las entidades soberanistas ANC y Òmnium Cultural han decidido solicitar al Supremo que les vuelva a tomar declaración para salir de prisión, después de que la causa por rebelión contra el Govern cesado la haya asumido el magistrado de este tribunal Pablo Llarena.

Cuando falta menos de una semana para el inicio de la campaña del 21D, a la que concurren todos los exconsellers excepto Meritxell Borràs, las defensas esperan sacar partido del nuevo escenario abierto por Pablo Llarena, que el pasado 9 de noviembre fijó una fianza para eludir la cárcel a la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, después de que ésta acatara el 155 de la Constitución y renunciara a la vía unilateral a la independencia.

En un escrito presentado hoy ante el Supremo, Junqueras y los exconsellers de ERC encarcelados -Raül Romeva, Carles Mundó y Dolors Bassa- recalcan que "aceptaron y aceptan" el artículo 155 y se comprometen a actuar "por las vías del diálogo y la negociación".

La defensa precisa que los consellers acatan el 155 "desde la más profunda discrepancia política y jurídica" y que "no renuncian a sus convicciones políticas", aunque enmarcan su proyecto político en una "lectura amplia, progresista y extensiva" de la Constitución que, "mediante la negociación y el diálogo, permita poner en manos de la ciudadanía" la decisión sobre el futuro de Cataluña.

Tras recordar que ahora no ocupan "posiciones de poder institucional que les permitan tomar decisiones susceptibles de generar un riesgo de reiteración delictiva", los exconsellers de ERC precisan que "están firmemente comprometidos a canalizar su actuación por las vías del diálogo y la negociación", en el caso de que en un futuro vuelvan a tener responsabilidades públicas.

En la misma línea, según fuentes jurídicas, se pronuncian ante el TS los exconsellers de Presidencia y Territorio, Jordi Turull y Josep Rull, del PDeCAT, que además de volver a prestar declaración para quedar en libertad han pedido a Llarena que anule la fianza de 6,2 millones que la Audiencia Nacional impuso al Govern cesado.

En los recursos que la semana pasada presentaron ante la Audiencia Nacional para pedir su puesta en libertad, Turull y Rull ya pidieron su puesta en libertad alegando que habían acatado "expresamente" el artículo 155 de la Constitución, sin ofrecer ni promover ninguna "resistencia", por lo que a su parecer no existe riesgo de reiteración delictiva.

En un acto en Barcelona, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha defendido que el hecho de que los exconsellers de ERC hayan acatado la ley ante el Tribunal Supremo demuestra "la fortaleza del Estado y del Estado de derecho".

"No voy a entrar en la valoración que pueda hacer el Tribunal Supremo porque corresponde a las autoridades judiciales; me limitaré a la valoración política. Lo que se demuestra es la fortaleza del Estado y del Estado de derecho. Y todo el mundo, sobre todo los catalanes, se hubiera ahorrado disgustos" si hubiesen acatado la ley desde el principio, ha señalado Sáenz de Santamaría.

En paralelo a la dinámica judicial, los partidos catalanes han proseguido hoy los actos de precampaña, y Junts per Catalunya (JxCat) ha elegido como lema "Puigdemont, nuestro president", una frase que sirve para reivindicar la "restitución" del presidente de la Generalitat cesado e intentar "ganar" las elecciones.

Desde ERC, su secretaria general y número dos en las elecciones, Marta Rovira, ha asegurado en un acto de presentación de los candidatos que "por muchos encarcelamientos y medidas cautelares" que haya de líderes independentistas "hay otras personas preparadas e ilusionadas" para sustituirlos.

La candidata de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha considerado por su lado que Puigdemont "no puede tener otra oportunidad" al frente del Govern, porque "volverá a hacer lo mismo", mientras que el primer secretario del PSC y candidato a la presidencia, Miquel Iceta, ha acusado a la líder de C''s en Cataluña de ser ella quien "piensa en escaños" y se ha sumado a las voces que apuestan por el diálogo.

Desde el PPC, Xavier García Albiol ha prometido ante un grupo de empresarios un paquete de rebajas fiscales en caso de que su partido esté en el próximo gobierno catalán, y ha alertado de la tentación de Ciudadanos y PSC de pactar con los ''comunes'' tras los comicios.

Por lo que respecta a ''los comunes'', el candidato de Catalunya En Comú-Podem a la presidencia de la Generalitat, Xavier Domènech, ha rechazado que la formación morada forme parte de un eventual Govern con ERC, Junts per Catalunya y la CUP tras el 21-D.