El secretario de Relaciones Institucionales del EBB del PNV, Koldo Mediavilla, ha coincidido con el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en que los exconsellers están encarcelados por "un Estado alejado de la práctica democrática". Por otra parte, ha afirmado que la marcha del pasado sábado en Bilbao fue "contra el PNV" y le extraña que Gure Esku Dago participara en una manifestación con ese "sesgo partidista".

En una entrevista a Radio Popular, recogida por Europa Press, el dirigente jeltzale ha asegurado que la situación de Cataluña es de "absoluta incertidumbre" y se vive "una "crisis, quizá la más importante que la democracia en el Estado ha tenido desde 1978".

Por lo tanto, ha asegurado que existe "una cierta zozobra" porque, cada día que pasa, hay "acontecimientos nuevos" que "nos meten de lleno en un mapa problemático sin parangón hasta la fecha".

En este sentido, ante las palabras del expresident de la Generalitat, Carles Puigdemont, que aseguraba que sus consellers están encarcelados por un Estado "alejado de la práctica democrática", ha indicado que "hace suyas" esas palabras.

A su juicio, los exconsellers encarcelados lo están por "motivaciones de carácter político, es decir por el ejercicio de sus funciones dentro de un gobierno legítimamente y democráticamente elegido".

Mediavilla ha indicado que quien piense que el problema de Cataluña estaba solucionado con la aplicación del artículo 155 de la Constitución y con la celebración de unas elecciones "se ha equivocado".

Según ha precisado, el problema en Cataluña es un "problema político de primer nivel" y "ni la vía judicial, ni la vía penal van a solventar el calado de esta problemática". A su juicio, solo habrá "un resultado positivo" si se aborda desde "el diálogo, la reflexión, el acuerdo y directamente desde la política y la democracia".

Mediavilla cree que el problema de Cataluña se terminará resolviendo "con la participación en las urnas de los catalanes", pero identificando "cuál es el ámbito en el que esta sociedad quiere vivir de cara al futuro y respetando esa voluntad y esa decisión".

El dirigente jeltzale ha señalado que la cita electoral del 21 de diciembre está contemplada por unos "como una vuelta a la legalidad" y el resto, los partidos independentistas catalanes lo pueden interpretar como un refortalecimiento de la estrategia soberanista". Mediavilla ha asegurado que hay un "choque de legitimidades", que, "al final, va a tener que resolver la ciudadanía catalana".

Mediavilla cree que el modelo territorial tenía el "melón abierto desde hace tiempo" y el hecho de que se vaya a abordar o no, depende de "la voluntad política". "Y voluntad política no la estamos contemplando, ni por parte del PP, ni por parte de la mayoría de las fuerzas que han apoyado el 155".

MANIFESTACIÓN

Por otra parte, ante la ausencia del PNV en la manifestación de este sábado convocada por la izquierda abertzale y diversos agentes sociales bajo el lema "Contra el 155. Democracia y derecho a decidir", ha asegurado que, cuando se plantea una convocatoria de marcha que "pretende ser unitaria", lo primero que se debe hacer es "respetar a todas las formaciones políticas su compromiso con la misma".

En este sentido, ha asegurado que esta marcha, -"en la que se habló muy poco de Cataluña y más de política vasca"- estuvo "mal planteada" desde su origen porque "no se pretendía que abarcara a todas las formaciones".

Mediavilla ha señalado que el mismo lunes en que el PNV valoraba la posibilidad de participar o no en la convocatoria, la izquierda abertzale y ELA "ya tomaron la decisión de presentar públicamente la convocatoria".

En este sentido, ha hecho una "llamada de atención" a la "falta de respeto" de sus promotores con Gure Esku Dago. "Supuestamente se pretende un apoyo transversal del conjunto de fuerzas vascas y han llevado a Gure Esku Dago a una manifestación que, al final, por impulso político, se convirtió en una marcha contra el PNV". "Nos gustaría que Gure Esku Dago hiciera una reflexión al respecto", ha asegurado.

Mediavilla ha manifestado que el tema catalán estaba en "el origen del lema y de la convocatoria" pero "al fin y al cabo lo que se estaba planteando son unas decisiones que pretendían tener una afección directa a la política vasca". A su juicio, es una "irresponsabilidad" y puede ser "legítimo", pero para ello se tenía que haber hecho "a cara descubierta y sin necesidad de ocultarlo tras la señera y el eslogan del 155".

A su juicio, los responsables de Gure Esku Dago no han estado "cómodos con la manipulación que, en relación a esta manifestación se ha dado". Tras indicar que respeta a Gure Esku Dago y este mismo domingo participó en la consulta que habían convocado sobre el derecho a decidir en Getxo, ha asegurado que le extraña que "participara en una manifestación con un sesgo partidista y político, tan relevante como el que tanto ELA como EH Bildu dieron a la manifestación".

Mediavilla ha señalado sobre la posición del PNV que es un partido independentista desde su fundación pero, "siempre, en todo momento ha buscado un ámbito pragmático de desarrollar políticas posibles que conduzcan al país a su construcción nacional sin desgarros y sin romper la convivencia entre vascos".

Por ello, según ha precisado, están "volcados" en presentar una oferta de nuevo estatus, desde el "respeto bilateral". "Cuando hablamos de una bilateralidad, significa que haya un respeto entre las partes, entendidas como de iguales. Convivir significa vivir juntos y eso significa por propia voluntad, no por imposición de uno hacia otro o subordinación de uno hacia otro", ha añadido.

Mediavilla ha indicado que, cada vez "está más claro", que esos conceptos de "soberanías unívocas que quizá en el siglo XIX pudieran darse, en el siglo XXI no existen". "Lo que hay son soberanías compartidas y, en ese ámbito de soberanías compartidas, es donde entendemos la posibilidad de una bilateralidad y un respeto mutuo", ha agregado.

El dirigente jeltzale ha señalado que, por su parte, los catalanes, "lo han intentando de todas maneras" y han sido "múltiples las ocasiones en las que han pedido participar en un proceso en el que se les permita decidir", pero, por parte del Estado "una y otra vez se ha ido cerrando puerta tras puerta hasta no dejarles más opción que, cuando las puertas se cierran, poder salir por la ventana".

Mediavilla ha indicado, en relación a si un estatus como el vasco podría ser la solución, que no va a decir a los catalanes "lo que tienen que hacer" y ha añadido que siempre estará "con la representación legítima de "Cataluña". "Ellos sabrán cuál es la mejor forma de abordar sus reivindicaciones políticas", ha apuntado.

Sobre el efecto de los pasos dados por el Gobierno central en las relaciones entre el PNV y este Ejecutivo, considera que, en la situación de "crisis territorial" y con la "excepcionalidad gravísima" que se ha dado con la aplicación del artículo 155, quienes apoyan esas medidas "han configurado ya un bloque que puede darle estabilidad al Gobierno de Mariano Rajoy en otros ámbitos, especialmente en el Presupuesto.

A su juicio, la "excepcionalidad de cómo se ha aplicado" el artículo 155 es "una amenaza para todos". "El desarrollo que el Gobierno de España ha hecho del artículo 155 nos resulta inaudito porque no es aplicable a ninguna legalidad vigente y nos parece una grave amenaza para el Estado de Derecho y para todo el artículo VIII de la Constitución que habla de las autonomías", ha apuntado.

Mediavilla ha señalado que las acciones adoptadas por el Gobierno español vienen a determinar que las autonomías "son una gracia otorgada, no son derechos subjetivos de los pueblos o nacionalidades".