El Ministerio de Educación ha enviado un tercer requerimiento a Cataluña al haber recibido nuevas denuncias sobre adoctrinamiento en centros educativos de la comunidad y estudia la posibilidad de llevar el asunto a los tribunales ante la falta de respuesta de la Generalitat.

Fuentes del departamento que dirige Íñigo Méndez de Vigo han informado a Efe de que el Ministerio está estudiando con sus servicios jurídicos iniciar un proceso contencioso-administrativo ante la ausencia de respuesta de la Consellería de Educación una vez ha vencido el plazo de un mes que ésta tenía para contestar.

Este nuevo requerimiento, que se suma a los remitidos los pasados 27 de septiembre y 6 de octubre y al que ha tenido acceso Efe, enumera decenas de "incidencias" ocurridas en centros catalanes en las últimas semanas.

A ellas hay que sumar "muchas" otras anónimas que se no han podido incluir "por temor de los padres a que señalen a sus hijas o hijos", así como las recibidas por el sindic de Greuges (defensor del Pueblo catalán) y la propia Consellería por parte de "padres y madres por politización de las aulas".

Entre las recogidas, el texto cita varias denuncias por actos de protesta por el encarcelamiento de los líderes de ANC, Jordi Sànchez, y de Omnium, Jordi Sánchez.

Así, un padre ha protestado porque en la escuela infantil CEIP Patronat Domenech de Barcelona "se ha aprovechado un acto infantil" para hacerlo, y otro porque sus hijos de 7 y 13 años fueron obligados "a asistir a un minuto de silencio a las 12" por este motivo el 17 de octubre en el del Instituto de Calldenetes.

Lo mismo ocurrió en el Joan Brossa de Barcelona, según una madre de un niño de 13 años que denuncia que hicieron bajar a los alumnos a guardar diez minutos de silencio, o en las Escolas Pías de Vilanova i la Geltru, donde delegados de clase de secundaria se personaron con una caja en forma de urna e invitaron a los alumnos a votar sobre la necesidad de liberar a los "Jordis".

Mientras, la Escuela Pública La Vitxeta de Reus recibe a los niños con el canto "Els Segadors", acto definido por su directora como "de defensa de la democracia, de la libertad de decidir y para denunciar los ataques que sufre el proceso soberanista" y "ante la intervención de nuestras instituciones, la privación de libertad y la represión del pueblo de Cataluña".

Una madre de una alumna de la Escuela Pública Infantil de Vall-Llobrega asegura que la maestra explicó que "España roba a Cataluña y que eso está muy mal" y que la docente fabricó en clase "urnas de papel y enseñó a todos los niños a votar SI".

Y la de una alumna de 16 años del IES Can Vilumara de Hospitalet de Llobregat (Barcelona) censura que en una clase, una profesora "empezó hablar de la independencia" y a decir que "los que hablan castellano son unos mal educados y barriobajeros".

El padre de una niña de 6 años de la Escuela Rosella de Viladecavalls (Barcelona), ha criticado que la profesora de su hija "comenta a todos los niños de clase que unos policías malos, con unas porras que se hacen grandes, pegaron y dispararon pelotas de goma contra la gente solo porque querían votar y no les dejaban".

También se ha denunciado que una profesora del Institut la Plana de Vic de Barcelona obligó a un grupo de menores de 15 años que se apartaron en el patio de un acto de protesta en el que se había desplegado una estelada y una pancarta con el texto "Per una Catalunya lliure i la republica catalana" a "escuchar el grito de independencia", entre otros casos.