El Consejo de Ministros ha aprobado hoy un real decreto ley por el que las empresas podrán decidir cambiar su domicilio social sin necesidad de contar con el visto bueno de la junta de accionistas, lo que facilitará la salida de Cataluña de las empresas que así lo decidan.

Según ha informado hoy el Ministerio de Economía en un comunicado, esta nueva normativa se aplicará a todas las empresas salvo aquellas cuyos estatutos incluyan una "mención expresa" por la que el consejo de administración no pueda ser competente para el cambio de sede.

Esta agilización llega en un momento en que numerosas empresas con sede en Cataluña han decidido o se están planteando cambiar su domicilio ante la deriva secesionista y la situación de inestabilidad.