El Gobierno asegura que el domingo no habrá ningún referéndum y reitera su oferta de diálogo para solucionar la situación en Cataluña, aunque cree que el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y su vicepresidente, Oriol Junqueras, han quedado ya deslegitimados como interlocutores.

A dos días de la fecha elegida por los independentistas para celebrar ese referéndum, el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, ha presidido una reunión del Consejo de Ministros que ha servido para analizar la respuesta a los posibles escenarios en la jornada del domingo.

Lo que ha garantizado el Gobierno es que "lo que suceda el día 1 no será un referéndum", según ha recalcado el ministro de Educación y portavoz del Ejecutivo, Íñigo Méndez de Vigo, en la conferencia de prensa posterior a la reunión del Consejo y a la que han asistido todos los miembros del Gabinete.

Méndez de Vigo ha recalcado que esa consulta es ilegal y carece de garantías democráticas, y ha advertido de que el Gobierno catalán y sus socios de la CUP tendrán que responder ante los tribunales de la "muy grave deslealtad institucional" en la que están incurriendo.

Una deslealtad que el Gobierno de Rajoy cree que afecta a los actuales responsables de la Generalitat para un futuro diálogo.

El portavoz del Ejecutivo ha precisado que el Gobierno está pensando en el 1 de octubre y que el 2 "será otro día", pero siempre desde una plena disposición al diálogo dentro de la legalidad.

Ante ese momento posterior al domingo, ha señalado que Puigdemont "tendrá que saber si puede ser interlocutor o no" después de que, como presidente de la Generalitat, esté siendo una de las personas que están actuando con esa "deslealtad notable y al margen de la ley" pese a los reiterados llamamientos para volver a la legalidad.

Fuentes del Ejecutivo han sido más explícitas al subrayar que tanto Puigdemont como Junqueras han quedado deslegitimados para dialogar una vez que se supere la jornada del domingo.

Lo que Méndez de Vigo ha subrayado es que sólo desde el pleno restablecimiento de la legalidad se podrá recuperar la convivencia en Cataluña.

También ha expresado su seguridad de que los Mossos d''Esquadra (que ha precisado que "son Estado") cumplirán la ley y el mandato judicial para colaborar con el resto de fuerzas y cuerpos de seguridad para en evitar el referéndum.

El portavoz del Gobierno ha criticado el "caos organizativo" y la "improvisación" de un referéndum que ha recordado que Puigdemont dijo que iba a consistir en una votación "como siempre" y que cree que ya sólo desea que consista en "una votación como sea".

Como ejemplo, ha explicado que, además de ser ilegal, el referéndum no tiene censo, ni papeletas, ni urnas, ni centros oficiales de votación, hasta el punto de que algunos lugares previstos para poder votar están "en la plaza del pueblo".

Ante la decisión de algunas asociaciones de padres de hacer actividades extraescolares todo el fin de semana para garantizar que los colegios sigan abiertos el domingo, Méndez de Vigo ha calificado de "deleznable" la "manipulación de los niños en cualquier causa política".

Tras advertir de que situaciones como esas sobrepasan "muchas líneas rojas", ha considerado que "algunos padres deberían reflexionar seriamente sobre el particular".

En todo caso, ha incidido en que las órdenes de la jueza que instruye el caso del 1-O son "meridianamente claras" en cuanto a la apertura de centros para la votación y ha opinado que no es bueno "buscar tretas para darle una vuelta a la ley".

Con todo, ha hecho un llamamiento "a la tranquilidad, la serenidad, el sentido común y a no cometer actos ilegales" y ha recalcado que es "muy importante evitar fracturas sociales".

Además de analizar los posibles escenarios del domingo, el Consejo de Ministros ha aprobado hoy tres recursos ante el Tribunal Constitucional contra tres leyes autonómicas catalanas, entre ellas la ley de hacienda y protección social y que pretendía ser el embrión de una seguridad social catalana tras una eventual independencia.

A la situación en Cataluña se ha referido también hoy el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, en un acto en la sede del Parlamento Europeo en Madrid.

Dastis ha admitido que la Generalitat ha ganado la batalla de la información con "propaganda" y "mentiras", y ha acusado a Puigdemont de haber pagado a un grupo de observadores internacionales para un referéndum en el que "no hay mucho que observar" porque no se va a celebrar.