Edmundo Rodríguez Sobrino, considerado el hombre fuerte en Latinoamérica del expresidente madrileño Ignacio González y que está en prisión desde el pasado 21 de abril por el caso Lezo, declarará hoy a petición propia ante el magistrado que investiga la causa.

Rodríguez, que recurrió sin éxito su ingreso en prisión, ha pedido comparecer voluntariamente coincidiendo con el relevo al frente de la causa de Eloy Velasco, que ha sido sustituido por el magistrado Manuel García Castellón, nuevo titular del juzgado central de instrucción 6 de la Audiencia Nacional.

De esta manera, será trasladado al tribunal desde la cárcel para que comparezca ante el juez, como hizo el pasado jueves la exdirectora del Canal María Fernanda Richmond, en prisión bajo fianza de cuatro millones de euros y que pidió al juez poder defenderse "desde la libertad".

El viernes, un día después de tomarle declaración, el magistrado rebajó la fianza de Richmond a 100.000 euros, que la imputada pagó ese mismo día y salió de prisión.

La Sala de lo Penal rechazó el pasado 8 de junio la excarcelación de Rodríguez por riesgo de fuga y de destrucción de pruebas, tras conocerse el pasado 7 de junio que ocultaba en un apartamento en Colombia 262.000 euros.

Se le imputan delitos de prevaricación, malversación de caudal público, corrupción en los negocios, negociaciones prohibidas a funcionarios, organización criminal y blanqueo de capitales por presunta corrupción en la gestión del Canal de Isabel II.

La investigación sitúa al imputado, exconsejero de La Razón, como director de una operativa defraudadora mientras fue presidente de la sociedad colombiana Inassa, participada mayoritariamente por Canal Extensia, filial del Canal de Isabel II.

Supuestamente colaboró en la compra de la brasileña Emissao, sobrevalorando su precio "con el fin de desviar a fines privados los fondos públicos utilizados en un adquisición" por 20 millones de dólares, afirmó la sala que le negó la libertad.

Eso le llevó a adoptar "conductas subrepticias que llevaron a colocar el importe de la compra, por valor de 31 millones de dólares en cuentas bancarias de Suiza y Brasil".

Además, se ha determinado "la existencia de un extenso patrimonio" a su nombre o al de su hija, tanto dentro como fuera de España (Reino Unido, República Dominicana y Colombia) y que supuestamente fue adquirido con los beneficios "de aquellos anómalos negocios".

Rodríguez y Richmond no son los únicos detenidos en prisión del caso Lezo que han pedido volver a declarar. También lo hizo el pasado viernes Ignacio González, que está en la cárcel sin posibilidad de fianza, como Rodríguez.

González solicitó así una nueva comparecencia en el mismo día en que García Castellón rebajó la fianza a Richmond.

El expresidente madrileño (al igual que hicieron Richmond y Rodríguez) ya reclamó su libertad sin éxito, al entender la Audiencia Nacional que persiste el riesgo de fuga, de reiteración delictiva y de obstrucción a la investigación.