La vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, Andrea Levy, ha acusado hoy al president catalán, Carles Puigdemont, de escuchar sólo a "los radicales de la CUP" y de alejarse, por ello, del "sentido común", lo que le ha conducido a un "delirio permanente" que pone en riesgo a la sociedad de Cataluña.

Las declaraciones de Levy en una entrevista en RNE se han producido a raíz de la destitución, ayer, del conseller de Economía y Conocimiento, Jordi Baiget, por haber expresado unas horas antes sus dudas acerca de la celebración del referéndum el 1 de octubre.

Se demuestra con el cese que Puigdemont se ha ido de la moderación, lo que le aboca a "la locura o al delirio". "Lo de ayer es un acto absolutamente irracional", ha añadido.

Estas palabras de Levy van en la línea de las que pronunció anoche el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, el catalán José Luis Ayllón, para quien el president "ayer se levantó bolivariano (alusión al proceso constituyente recogido en el borrador de la Ley de Transitoriedad) y se acostó fascista".

En COPE, el secretario de Estado ha recalcado que en Cataluña se está percibiendo "una falta de democracia cada vez más preocupante" debido a "las presiones constantes" a políticos, alcaldes, funcionarios y medios de comunicación.

Hoy Levy ha considerado sobre la reciente estrategia y últimas decisiones del presidente de la Generalitat que están supeditadas a la CUP, y así, ha atribuido a esta formación, a sus "chantajes", la destitución de Baiget.

La dependencia de la CUP está llevando a Puigdemont a "un delirio permanente" y a poner en "riesgo a toda la sociedad catalana".

Sin embargo, ha matizado acto seguido la dirigente catalana del PP, el presidente del Govern de Cataluña tiene "un problema", que a "los catalanes que discrepan" no los puede "purgar" como en su opinión hizo ayer con el exconseller de Economía.

Levy, además, tras señalar que el borrador de la llamada Ley de Transitoriedad Jurídica de Cataluña está fuera de "los cauces democráticos", ha advertido de los "niveles de calidad democrática cada vez más bajos" del Parlament de Cataluña y de la Generalitat.

Por ello, ha apelado a "los políticos sensatos" del Govern para que, sin miedo, expresen sus opiniones sobre el referéndum del 1 de octubre.

Para la vicesecretaria del PP, "hay más voces discrepantes en el PDeCAT" y en la propia Generalitat.

En cuanto a la carta que ayer envió el Gobierno a los ayuntamientos, diputaciones y comarcas de Cataluña para advertirles de que no pueden participar en la consulta por ser inconstitucional, la dirigente del Partido Popular la ha encuadrado en la responsabilidad del Ejedutivo de dar "garantías" a los funcionarios municipales, pues "no tienen la culpa de los delirios del Govern".