Nombres como los de las plazas del Caudillo, Arriba España o la calle de los Caídos de la División Azul desaparecerán definitivamente del callejero de Madrid, tras aprobarse en el pleno municipal el cambio de 52 calles franquistas, adaptándose así a la Ley de Memoria Histórica.

Diez años después de aprobarse esa normativa estatal, el Ayuntamiento de Madrid, con la abstención del PP y el apoyo de Ahora Madrid, PSOE y Cs, ha decidido que este mismo mes de mayo la calle que dedicaba al militar y aviador García Morato tome el nombre del corresponsal gráfico de guerra húngaro Robert Capa o la Travesía del General Franco reciba el del poeta, dramaturgo y sacerdote Diego Torres Villarroel.

La plaza Arriba España será de la Charca Verde, la calle de los Caídos de la División Azul será la del Memorial 11 de marzo de 2004, en honor a los fallecidos en el atentado yihadista de los trenes de Atocha y Vallecas, y la del General Dávila se transformará en la del escritor Max Aub.

La avenida del Arco de la Victoria será la avenida de la Memoria, al igual que el propio arco que conmemoró la victoria del bando nacional en la Guerra Civil y que el Comisionado ha pedido convertir en un espacio de difusión de la memoria histórica de la ciudad.

La mayoría del Pleno municipal ha mostrado el apoyo al listado de un comisionado externo al que la alcaldesa, Manuela Carmena, con el apoyo de los grupos políticos, encargó una propuesta de adaptación del callejero en la que se buscó actuar "sin revanchismo" y con el mayor consenso posible.

La decisión del Pleno será aprobada definitivamente en la próxima semana en la Junta de Gobierno de la ciudad, que es quien tiene la competencia en el cambio de calles. Los rótulos comenzarán a cambiarse a partir del mes de mayo.

"Sin memoria no hay democracia", han gritado desde el estrado los representantes de asociaciones de memoria que han asistido al Pleno, a quienes la alcaldesa ha pedido silencio en varias ocasiones y "respeto" tras la intervención del popular Pedro Corral, contrario al cambio "sectario" del callejero.

Aunque el listado inicial con el que trabajaban las asociaciones de memoria reivindicaba la supresión de 129 calles relacionadas con el Franquismo, desaparecerán finalmente 52 rótulos que incumplían el artículo 15 de la Ley de Memoria, según el grupo de expertos liderado por la histórica socialista Paca Sauquillo. Inicialmente el grupo había propuesto 47, pero admitió alegaciones.

El artículo 15 de la ley señala que las administraciones públicas tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura del general Francisco Franco.

En el debate plenario, el tercer teniente de alcalde de Madrid, Mauricio Valiente (Ahora Madrid) ha considerado que "cada día que pasa" sin retirar del callejero las calles franquistas es una "losa" que cae sobre la memoria y ha animado a seguir "adelante con la verdad, la justicia y la reparación a las víctimas".

Y tras recriminar a los populares que hayan gobernado siete años sin cumplir con la ley de memoria, ha augurado que con el tiempo se arrepentirán de no haberse sumado al resto del Pleno.

Sin embargo, el concejal del PP Pedro Corral ha sostenido que la retirada de calles ''franquistas'' no estaba entre las prioridades de los madrileños y ha mostrado su rechazo a un cambio del callejero realizado en su opinión "en los peores términos del sectarismo e ignorancia histórica".

Mientras, la edil socialista Mar Espinar ha señalado que han pasado diez años sin que en Madrid se haya hecho "nada" por cumplir una ley en la que deberían estar de acuerdo todos los demócratas y, finalizado el Pleno, ha declarado a los periodistas que el de hoy ha sido un "día histórico" para la capital.

Por parte de Ciudadanos, Sofía Miranda ha mostrado el apoyo de su grupo al cambio de calles, pero ha reprochado a Ahora Madrid que en este tiempo no haya tenido una verdadera voluntad de entendimiento.

El paso dado hoy por el Pleno se suma a la retirada el año pasado -con el voto en contra del PP- de las distinciones honoríficas concedidas al expresidente Carlos Arias Navarro, la Organización Juvenil Española (OJE) o la Sección Femenina, entre otras personalidades y organizaciones relacionadas con el Franquismo.