El ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, ha aclarado hoy que el Plan de Convivencia Escolar no es de "obligada imposición" para las comunidades autónomas ya que no tiene carácter legislativo, pero que ha dicho que era deber de su departamento aportar las medidas para prevenir y reprimir el acoso.

El ministro ha respondido así a los consejeros autonómicos socialistas de Educación, que esta mañana habían denunciado que el plan supone "duplicar" los ya existentes en las comunidades, una "invasión" de competencias y "no" se ha contado con ellas.

Méndez de Vigo ha explicado en la rueda de prensa posterior a la Conferencia Sectorial que las comunidades pueden implementar las medidas recogidas en el plan y que en algunos casos "ya lo hacen".

El Plan Estratégico de Convivencia Escolar tiene puesto en marcha desde el pasado noviembre un teléfono gratuito (900 018 018) contra el acoso escolar que ha recibido ya 13.844 llamadas, de las cuales 5.014 potenciales de "bullying".

Además, prevé la celebración de un Congreso Estatal de Convivencia escolar anual, la creación de la figura del responsable de la convivencia en los centros, con descarga horaria o una "app" que ayude a las víctimas de acoso escolar.