Las copiosas nevadas registradas en Castilla-La Mancha desde la tarde de ayer y esta madrugada han provocado la caída de torres de alta tensión que han dejado sin suministro a más de 20.000 vecinos de la región, si bien se está recuperando la normalidad de forma paulatina.

En declaraciones a Efe, el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, José Julián Gregorio, ha informado, asimismo de que unos 125 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) han trabajado durante la noche para despejar las carreteras de nieve y atender a las personas que habían quedado atrapadas.

Gregorio ha explicado que la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha activó a las 15.00 horas de ayer todos los servicios de prevención y se trasvasaron medios de la provincia de Ciudad Real a la de Albacete para atender las nevadas, mientras que a lo largo de la tarde se recomendó no circular por la A-30 y A-31 en la provincia de Albacete y, ya por la noche, se aconsejó no circular por la A-3 en Cuenca.

Además, ha indicado que a partir de las 22.00 horas se activó la UME, que ha estado trabajando toda la madrugada en colaboración con la Guardia Civil, Tráfico y servicios de Emergencias para limpiar todas las vías nacionales.

En cuanto a los cortes de luz, Gregorio ha indicado que, en estos momentos, hay unas cien personas de Iberdrola trabajando para recuperar el suministro, con tareas como llevar postes para restablecer la electricidad o, en los casos en que sea más difícil, se están llevando equipos electrógenos.

Gregorio ha indicado que, precisamente la caída de los postes eléctricos, fue una de las causas que provocó la interrupción de la circulación de trenes en la provincia de Albacete y que dejó a 1.500 viajeros atrapados.

En este sentido, ha agradecido la labor de Cruz Roja, que atendió con mantas y bebidas calientes a los pasajeros que quedaron atrapados en el tren que se averió en Bonete, en el momento en que llegaron a la estación de Albacete Los Llanos.

Y ha pedido disculpas a todos los pasajeros que ayer se vieron afectados por esta interrupción de la circulación.

Ha indicado, asimismo que todas las carreteras de la red nacional están limpias de nieve, si bien ha recordado que en la A-3 el nivel es amarillo, por lo que no pueden circular camiones y, en general, la recomendación es que evitar la circulación por la zona de Valencia, que es la más afectada.