La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha afeado este martes al portavoz de la antigua Convergencia en el Senado, Josep Lluis Clèries, que acuda a la Cámara Alta pensando en un solo catalán, el exconsejero Francesc Homs, al que el Tribunal Supremo ha citado a declarar como investigado por la consulta del 9 de noviembre.

"Ningún poder público persigue a nadie. Lo que hacemos es defender la ley porque la ley es el mandato de los ciudadanos y es la mejor garantía de que nadie impone su voluntad arbitraria a otro y no judicializa nadie más la vida política que aquellos que han decidido situar la política catalana fuera de la ley, fuera de la Constitución y fuera de las sentencias judiciales", ha afirmado.

Así se ha pronunciado Santamaría en el Pleno del Senado después de que el senador de CiU Josep Lluis Clèries haya denunciado que se persiga "judicialmente a quien facilita un proceso participativo y cívico". "Además, ahora sabemos que ministros como José Manuel García-Margallo reclamaba una actuación no judicial a las demandas catalanas", ha apostillado.

Precisamente, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Carles Puigdemont; el vicepresidente, Oriol Junqueras; y el expresidente Artur Mas han denunciado este martes en Madrid que el Congreso va a escribir una "página vergonzante de su historia" al aprobar el suplicatorio solicitado por el Tribunal Supremo contra el portavoz de la antigua Convergència, Francesc Homs, por la consulta soberanista del 9N, y han advertido de que con decisiones así la democracia está "en peligro".

"¿CÓMO VA A APLICAR SU VOLUNTAD DE DIÁLOGO?"

A renglón seguido, el senador de la antigua Convergencia ha emplazado a Santamaría a explicar "como piensa aplicar su voluntad de empatía y diálogo". La vicepresidenta le ha respondido que empatía es "compartir inquietudes y sentimientos".

"Y compartimos los de los siete millones de catalanes, que son la prioridad de este Gobierno. La suya quizá son de los procesos de su gente, que más vale que hubiera cumplido la ley", ha espetado Sáenz de Santamaría a Clèries.

La vicepresidenta del Gobierno ha dejado claro que todos están sometidos a la ley porque es la "expresión de la voluntad democrática de los ciudadanos y ha aprovechado de nuevo para tender la mano al diálogo al Gobierno catalán.

Así, Santamaría ha pedido pasar del "agravio comparativo y del reproche" y ponerse a trabajar por el conjunto de los ciudadanos, hablando de los temas que les preocupan como las inversiones, las infraestructuras o el FLA, pero "siempre dentro del marco de la ley", "buscando la lealtad institucional" y "buscando unir al conjunto de los españoles" y no distanciándose.

"MALTRATO" A CATALUÑA

En su intervención, el dirigente catalán ha echado en cara a Santamaría las sentencias que el Gobierno no cumple y el "maltrato" que esta comunidad "sufre por parte del Estado", citando la "pésima financiación", la situación de los cercanías o las inversiones no ejecutadas o los "ataques" a la lengua catalana, algo que, según ha dicho les ha llevado a donde están ahora.

Además, ha criticado que el Gobierno busque "respuesta en los tribunales" cuando, a su juicio, la respuesta "está en la política". Y ante la oferta de diálogo que ha ofrecido Sáenz de Santamaría, ha replicado: "Si ahora vienen serán bien recibidos, pero diálogo bilateral, de tú a tú. El café para todos ya lo hemos probado y a Cataluña siempre le ha ido mal".