La Fiscalía Anticorrupción rechaza por el momento que las distintas investigaciones abiertas a miembros del clan Pujol que se tramitan en el juzgado de Instrucción número 31 de Barcelona (contra el expresidente de la Generalitat y su esposa, Marta Ferrusola), en la Audiencia Nacional (contra su hijo Jordi Pujol Ferrusola, y su exmujer Mercè Ginorès) y en la propia Fiscalía contra Oleguer Pujol lleguen a acumularse algún día en un único procedimiento.

Fuentes de Anticorrupción consultadas señalan que hay que tener en cuenta que las investigaciones son aún muy incipientes, afectan a hechos muy concretos y diferentes en cada caso y no existe por el momento ningún punto de conexión. En todo caso la existencia de un eventual "macroproceso" contra los Pujol iría en contra de la agilidad de las investigaciones.

En contra de esta postura se ha venido manifestando Manos Limpias, que presentó la querella contra Jordi Pujol y su esposa en Barcelona y ha solicitado personarse en la que desde hace meses instruye el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz contra el primogénito del expresidente de la Generalitat y su esposa Mercé Gironés por presuntos delitos de blanqueo de capitales y contra la Hacienda Pública.

Según señaló el secretario general del sindicato, Miguel Bernad, a principios del pasado mes de agosto "los dos casos están conectados" ya que "en el entramado societario de Jordi Pujol hijo está metido el padre". Por esta relación tan estrecha, desde el sindicato sopesan que en el caso de que la juez de Barcelona inicie actuaciones contra Jordi Pujol la causa pueda unirse a la que instruye el juez Ruz.

La querella presentada por Manos Limpias ante la juez de instrucción número 31 de la ciudad condal ha sido admitida a trámite. Contra esta decisión recurrió el abogado del expresidente, Cristóbal Martell, y que está pendiente de ser confirmada tras recibirse el escrito del Ministerio Público, cuyo contenido es contrario a las impugnaciones del letrado.

Manos Limpias presentó querella contra Pujol y Ferrusola por presuntamente defraudar hasta 3.000 millones de pesetas -unos 18 millones de euros- y cobrar comisiones a cambio de adjudicaciones durante los 23 años en los que el político dirigió la administración catalana. El asunto ha sido encargado al fiscal anticorrupción Alejandro Luzón, según confirmaron fuentes del Ministerio Público.

El sindicato calcula que el dinero defraudado por la familia con la comisión continuada de los delitos contra la hacienda pública, blanqueo, malversación de caudales públicos, cohecho, tráfico de influencias y falsedad documental oscilaría entre los 10 y los 18 millones de euros.

Querella de Podemos

La plataforma Guanyem Barcelona y Podemos, con el apoyo de partidos de izquierda como ICV, presentarán una querella contra la familia Pujol, asesorados por el exfiscal Anticorrupción Carlos Jiménez-Villarejo, que en 1986 intentó sin éxito que se procesara al expresidente catalán por el caso Banca Catalana. Según informó Guanyem en un comunicado, la querella se hará pública hoy. También hoy la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlament pedirá que comparezca en la cámara catalana el expresidente de la Generalitat.