Los grupos de la oposición en el Senado han pedido, durante la Comisión de Educación, la retirada del proyecto de Ley de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) con el objetivo de abrir un "proceso de diálogo" con las fuerzas políticas y la comunidad educativa para consensuar un texto distinto al aprobado en el Congreso de los Diputados, que sólo ha contado con el apoyo del PP.

Así se lo han trasladado los portavoces del PSOE, CiU, Entesa Catalana del Progrès y Amaiur a la secretaria de Estado de Educación, Formación Profesional y Universidades, Montserrat Gomendio, que ha acudido a la Cámara alta a defender la reforma educativa. Los senadores de estos grupos han coincidido en reprochar a la ''número dos'' del Ministerio de Educación que la LOMCE es "segregadora", "favorece" a la enseñanza privada frente a la pública o no respeta el reparto competencial ni las lenguas cooficiales.

Aunque la portavoz de Educación del PNV, Rut Martínez, no ha podido asistir al debate del texto en esta Comisión, sí ha manifestado, en declaraciones a Europa Press, la intención de su grupo de pedir el veto a la LOMCE y ha asegurado que va a mantener las mismas enmiendas que presentaron en el Congreso, que no fueron aceptadas ninguna por el PP.

El portavoz de Educación del PSOE en la Cámara alta, Vicente Álvarez Areces, ha asegurado que el Ministerio de Educación "descalifica" con esta ley todo lo conseguido con anterioridad y que recoja aspectos "predemocráticos". A su juicio, el Gobierno no puede pretender una mejora de la calidad de la enseñanza mientras recorta "más de 5.000 millones de euros".

El senador socialista ha asegurado que el Ejecutivo busca con esta ley la "mercantilización" y "privatización" de la enseñanza, "atacar" a la red pública, establecer un sistema "segregador y clasista", así como "recentralizador". Asimismo, ha advertido de que Educación pretenda mejorar el rendimiento de los alumnos sin hacer "ni una sola mención al profesorado" en el texto y ha alertado de que lo que busca es "recortar" efectivos.

"Vamos rechazar este proyecto de ley para abrir un proceso de diálogo con las fuerzas políticas y la comunidad educativa con vocación de estabilidad y respetuoso con la realidad lingüística del Estado. Si no es así, esta ley nace muerta", ha aseverado Álvarez Areces.

El senador de CiU, Ramón Alturo, ha manifestado su "decepción" por que la secretaria de Estado haya acudido hoy al Senado a explicar la ley cuando el proyecto ya está en proceso de enmiendas. "Las explicaciones llegan tarde y el debate hoy es otro", ha advertido el senador catalán, que le ha preguntado si el Gobierno va a "imponer" la ley frente a "todas las voluntades" o va a negociar en esta cámara y aceptar enmiendas distintas a las del Grupo Popular. "Queremos que retiren la LOMCE y se abra un proceso de diálogo", ha afirmado Alturo, para advertir a Gomendio de que el Gobierno "está solo".

"CRIMINALIZACIÓN DEL PROFESORADO"

"A este Gobierno no le importa la educación", ha afirmado la portavoz en esta comisión de la Entesa Catalana del Progrès, María Jesús Sequera, al principio de su intervención. A su juicio, no se necesita una nueva ley sino cambiar algunos aspectos que no funcionan del sistema educativo. También ha reprochado a Gomendio la "falta de diálogo" para realizar un diagnóstico compartido, además del trato "discriminatorio" a las lenguas cooficiales, la "segregación" mediante reválidas, el "desprestigio" de la FP, la "criminalización" de los docentes o el "premio" a los centros que segregan por sexo. "Pedimos la retirada de la LOMCE y votaremos en contra de la ley", ha apostillado.

Desde el Grupo Mixto, la senadora de Amaiur Amalur Mendizábal ha tachado de "insultante" el proyecto de ley, por su intención "uniformadora", que, según ha dicho, no responde a las necesidades educativas del País Vasco, cuyo sistema "hay que preservar". El "ataque al euskera", la vuelta a "tiempos pasados", o la "falta de diálogo" son algunos de los reproches que esta senadora ha dirigido a la secretaria de Estado sobre su proyecto normativo y le ha trasladado su compromiso de derogarlo en cuanto cambie la mayoría parlamentaria.

La afirmación de la senadora Sequera sobre la "criminalización" del profesorado ha sido objeto de polémica en la sesión de este martes, pues tanto la secretaria de Estado, como la presidenta de la Comisión, como el portavoz ''popular'' Luis Peral han pedido que retirara sus palabras. "Esto está fuera de lugar, no responde a la realidad y es una falta de responsabilidad", ha dicho Gomendio a la senadora, que, sin embargo, se ha negado a retirar sus palabras.

En el turno de réplica, la secretaria de Estado ha insistido en la "evidencia" de los estudios internacionales para defender su reforma. "Los datos son incontestables y otra cosa es las interpretación que se haga de ellos. La mayor parte de las reformas educativas (de los países con mejores resultados) se basan en evidencias y no en percepciones subjetivas sin ningún dato que la sustente", ha advertido al PSOE.

En cuanto al rechazo de la comunidad educativa, la ''número dos'' de Educación, ha afirmado que la comunidad educativa "somos todos" y "ningún" sindicato o partido político puede atribuirse, a su juicio, erigirse como "portavoz". En este sentido, ha recordado que hay ocho millones de alumnos, "con sus padres, abuelos y tíos".

"EN UNA COMUNIDAD SE EXCLUYE AL CASTELLANO"

En cuanto al modelo lingüístico, Gomendio ha señalado que el Ejecutivo entiende que el Estado tiene la competencia de definirlo y de "velar" por el derecho de las familias a elegir la lengua con la que quieren que sus hijos sean educados. Asimismo, ha argumentado que en la LOMCE no hay "ninguna" propuesta sobre cómo debe ser en las comunidades autónomas con lenguas cooficiales. "En la mayoría, hay sistemas de integración bilingües y trilingües, excepto en una donde se excluye el castellano y no se permite a las familias elegir", ha señalado en alusión a Cataluña.

Por último, ha defendido que el Ministerio de Educación ha estado abierto al diálogo y que éste ha sido "muy amplio" durante el proceso de elaboración del proyecto. Sin embargo, ha lamentado que las fuerzas políticas de la oposición no hayan hecho propuestas "constructivas" y se hayan limitado a "negar que hay problemas".