El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido este martes que la "sustancial" rebaja del déficit en dos puntos porcentuales durante el año 2012, hasta alcanzar la cifra del 6,74%, permite "avanzar en la credibilidad y confianza" del país a la hora de reducir el desfase de las cuentas públicas, a la par que ha subrayado que trata de un dato "muy positivo".

En la sesión de control al Gobierno en el Senado, Rajoy ha dicho que la cifra publicada "no es una previsión, sino que es un dato" aportado por la Intervención General del Estado, y que además se ha conseguido en la "peor de las situaciones".

"En el año 2012 pedimos prestados 24.000 millones de euros menos, por lo que ahorramos intereses para el pago de la deuda y avanzamos en la credibilidad y confianza de las cuentas públicas, y lo hemos hecho en la peor de las situaciones", ha indicado.

Asimismo, el presidente del Gobierno ha explicado que la Comisión Europea (CE) publica como cifra de desfase público el 10,2% porque tiene en cuenta el impacto de las ayudas a las entidades financieras, que, sin embargo, no computan en el procedimiento de déficit excesivo, dado que "es de una sola vez y se debe a circunstancias extraordinarias". También ha indicado que excluyendo las concesiones a las entidades financieras, Bruselas espera un desfase del déficit español del 7%.

Así, Rajoy ha recordado que en el año 2008 muchos países de la Unión Europea inyectaron cantidades "muy importantes" de dinero público a sus entidades financieras, mientras que en España "no se quiso hacer cuando lo hacían el resto de países del mundo y se dijo que vivíamos en el mejor sistema financiero del mundo".

Sin embargo, el presidente ha criticado que posteriormente el Gobierno español comenzó "los parches" inyectando dinero público español por hasta 21.000 millones de euros dedicados a afrontar pérdidas, de los cuales, ha dicho, que 14.000 millones ya han impactado o impactarán en el déficit público. "Ese es dinero español perdido", ha ahondado.

Del mismo modo, ha concretado que en 2011 fueron a déficit 4.000 millones de euros, que son los que dieron lugar a la diferencia entre el 8,9% y el 9,4% de déficit cerrado en 2011; mientras que en 2012, el actual Gobierno "ha tenido que meter 7.000 millones" que el Ejecutivo socialista "inyectó en los bancos". "Pero como no fue suficiente para arreglar los problemas tuvimos que pedir un préstamo a la Unión Europea para asumir pérdidas anteriores, y eso es lo que da lugar a 26.269 millones de euros que van al déficit de 2012", ha explicado.

Ha defendido que el primer punto del programa electoral del Partido Popular era reducir el déficit público ya que se trata de "un requisito sine qua non", para lograr crecimiento económico y empleo. Sin embargo, ha denunciado que "arreglar algunas cosas que le dejan a uno", en referencia al anterior Ejecutivo socialista, "no ha sido fácil" y menos "se puede hacer en media hora".

De cara al futuro, el presidente ha aseverado que el objetivo es seguir rebajando el déficit "para no seguir viviendo de prestado, porque es difícil y caro", dado que es capital para abordar el "crecimiento y la recuperación del empleo".

Por último, Mariano Rajoy ha defendido que "todas las agencias" han dicho que en materia de reducción del déficit público, España "ha cumplido sus deberes" y ha exhortado a los socialistas a que tengan "buena fe" a la hora de évaluar la cifra de déficit de las cuentas públicas.

EL PSOE DICE QUE EL DÉFICIT DEMUESTRA EL FRACASO DEL GOBIERNO.

Por su parte, el portavoz socialista en el Senado, Marcelino Iglesias, ha denunciado que la cifra de déficit conocida demuestra el "evidente y estrepitoso fracaso" de la política económica del Ejecutivo, que, según ha dicho, se ha caracterizado por "un ajuste de caballo" en el peor momento que vive España "desde el final de la Transición".

"Hagan lo que hagan, con el maquillaje que hagan, o lo que sus portavoces cantineen, el déficit demuestra el evidente y estrepitoso fracaso de su política económica", ha apostillado el senador socialista.

Además, Iglesias ha aseverado que España "está peor que hace un año" puesto que la crisis económica se ha generalizado y "se ha contagiado a toda la sociedad". Además, ha criticado que el Gobierno "ha batido el récord" de pérdida de confianza por parte de la ciudadanía. "Están bloqueados e inhabilitados para pedir cualquier nuevo esfuerzo", ha sentenciado.