El Partido Popular en el País Vasco solicitó ayer al Gobierno que remita de forma "urgente" al Congreso un proyecto de reforma de la Ley Electoral que evite toda "rendija" por la que "los terroristas se puedan colar" en las próximas elecciones municipales.
El secretario general de los populares vascos, Iñaki Oyarzábal, compareció ayer ante los medios en Vitoria para informar del análisis hecho por el comité ejecutivo de su partido sobre la situación política generada tras el último comunicado de ETA.
Hizo un "llamamiento" a los gobiernos central y vasco y al PSOE para que no se "baje la guardia" en la lucha contra el terrorismo y "evitar que ETA o cualquiera de sus marcas pueda participar en las próximas elecciones".
A juicio del PP vasco, evitar esta presencia supondrá "el mayor paso para el fin definitivo de la violencia terrorista". "Si se consigue que ETA no esté en los próximos ayuntamientos se habrá dado un paso de gigante para el final definitivo del terrorismo", insistió.
Se congratuló de que tras el comunicado, la mayoría de los partidos vascos, especialmente los tres mayoritarios, PNV, PSE-EE y PP, hayan "compartido" el análisis de que este pronunciamiento de ETA es un "engaño". Tras alegrarse de que ya "nadie les cree", Oyarzábal se mostró optimista sobre el final de ETA, porque cada vez tiene "menos apoyo social" y señaló que "lo que más debilita" a la organización es el "acuerdo en Euskadi" entre socialistas y populares.
Insistió en que la "tregua electoral" de ETA responde a una "estrategia diseñada por el núcleo duro de la organización terrorista, con el objetivo de sembrar confusión e intentar colarse en los comicios".
Nuevos comunicados
El secretario general del PP vasco aventuró que, probablemente el mes de octubre, habrá nuevos comunicados de ETA, "nuevos intentos de engaño", y que conforme se vaya acercando la cita electoral del mes de mayo "va a ir creciendo el nerviosismo en ese mundo".
Explicó que de los casi medio centenar de ayuntamientos "que hoy controlan", en referencia implícita a los gobernados por la izquierda abertzale, "depende buena parte de su financiación" y el futuro de sus "liberados".
Según Oyarzábal, el comunicado de ETA es "más de los mismo", porque la organización terrorista, "en lo político, no se ha movido un ápice", ya que lo dicho es "apología del terrorismo y respaldo de su actuación asesina".
Además, añadió, no es un documento "sincero" cuando dice que hace meses tomó la decisión de cesar en sus acciones, porque, recordó, los empresarios siguen siendo chantajeados o la violencia callejera continuó este verano.
Por su parte, el Gobierno tiene intención de abordar si fuera necesario modificaciones legislativas para evitar la presencia de ETA en las instituciones, aseguró el ministro de Justicia, Francisco Caamaño.
Sobre el comunicado de ETA, Caamaño recordó que la posición del Ejecutivo es clara y rotunda y que su intención es que quienes no condenen claramente la violencia y no dejen esa forma de actuar en Democracia no estén en los organismos democráticos.