El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, aseguró ayer que las detenciones ayer en Alicante fueron "confusas" y "echan tufo a detención publicitaria y política" para allanar el camino de José Luis Rodríguez Zapatero "de cara al debate del estado de la nación más difícil de su vida".

En una rueda de prensa en la sede del PP, González Pons exhibió un documento del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV), la citación de la Policía y la nota de prensa facilitada el martes a los medios para confirmar que la Policía mintió, no hubo orden judicial y las detenciones se decidieron en Madrid, así como el día y la forma "tan espectacular" de actuar.

Por ello, González Pons exigió una "aclaración inmediata" del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, de todos los "puntos oscuros", informó de que el PP no entrará a valorar el fondo de los hechos e insistió en que la detención, en concreto la del presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, del PP, tenía la clara intención de hacer publicidad a favor del Gobierno y en contra de la oposición. González Pons también dijo que con Rubalcaba al frente de Interior "las garantías constitucionales, los derechos fundamentales y la certeza de que impera el Estado de Derecho están en riesgo".

Pons evitó contestar si la Dirección del PP apoya a Ripoll y comentó que el PP no entra en el fondo, pero sí en los "gravísimos hechos" acaecidos que sugieren una vulneración de los derechos fundamentales de los ciudadanos por parte de la Policía.