El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, confirmó este lunes en los Desayunos Informativos de Europa Press que ya tiene algunas "ideas" en mente sobre la próxima reestructuración del organigrama de su departamento, que se aprobará "en breve", aunque, según matizó, primero debe hablar con el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, para obtener la "luz verde" a su proyecto. El ministro no quiso confirmar aspectos concretos de esta reforma (como cuántos altos cargos o secretarías de Estado se suprimirán) aunque sí avanzó que se reducirán los órganos de dirección y se agruparán las direcciones generales.

Asimismo, subrayó que los cambios no buscan sólo contribuir a reducir el déficit público, sino que pretenden adaptar el Ministerio "a la nueva realidad" española y europea. El nuevo organigrama del departamento que dirige estará "muy inspirado" en el que ha elaborado la Alta Representante de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, aseguró. Será una reestructuración "seria, profunda y moderna", aseveró.

Moratinos también dio por hecho la desaparición de unas "pocas" embajadas de España por la entrada en vigor del servicio europeo de acción exterior, que deberá convertirse en el principal instrumento de la política exterior de la UE, con hasta 6.000 funcionarios y una red de misiones en todo el mundo.

"En un futuro, desde luego" que desaparecerán algunas embajadas españolas en exterior, ya que los intereses de nuestro país podrán ser defendidos a través de la representación de la UE, respondió el ministro al ser preguntado por esta cuestión.

No obstante, precisó que serían "muy pocas" las embajadas que podrían echar el cierre. En la actualidad, España tiene abiertas 123 jefaturas de misión diplomática en todo el mundo.

NUEVA LEY DEL SERVICIO EXTERIOR

El ministro también adelantó que el Gobierno trabajará con el resto de las fuerzas políticas para elaborar una "nueva ley del servicio exterior" que tendrá que tener en cuenta no sólo "los intereses permanentes" y tradicionales de la agenda internacional española.

Moratinos abogó por que se dé al Ministerio de Exteriores mayor "capacidad" para mejorar la calidad de las exportaciones españolas, fundamentales para que España salga de la crisis.

También hizo balance de la presidencia española del Consejo de la UE en este primer semestre de 2010, que calificó de "satisfactorio" y que concluyó "con dignidad", en su opinión.

El ministro se mostró convencido de que en este mundo global "hace falta más Europa" para que los intereses nacionales de los Veintisiete estados miembros puedan desarrollarse, lo que implica en ocasiones hacer una cierta "dejación de soberanía" nacional.